Para muchos, las mascotas son miembros de la familia, y dejarlos en manos de un negocio de grooming, donde los bañan, les cortan las uñas y peinan, es una decisión que implica una gran confianza. Sin embargo, ¿qué sucede cuando esa confianza se ve traicionada y su mascota sufre una lesión durante el servicio?
Es una situación angustiante que se ha presentado varias veces en Costa Rica.
El último caso se dio a mediados de julio, cuando un cachorro de seis meses habría sufrido graves lesiones en la cadera tras una cita de grooming en un local de San Sebastián, San José.

Sus dueñas denunciaron las presuntas agresiones mediante un video publicado en las redes sociales, en el que se observa a una mujer tratando bruscamente al perrito y golpeándolo con su mano, mientras lo cepilla.
También en este año, en enero pasado, Daniela Chacón Salas denunció a una tienda para mascotas tras la muerte de su gato mientras era atendido por un servicio de grooming en Multiplaza Escazú. De acuerdo con la joven, a la mascota le aplicaron la eutanasia sin consultarle nada a ella, pese a no tenía ninguna complicación médica previa.
Angie Portela, gerente legal de APriori Derecho Corporativo, se refirió a los pasos a seguir y los derechos de los propietarios de mascotas en Costa Rica, en caso de que se presente una lesión de este tipo.
Recopilar pruebas: primera línea de defensa
Ante una lesión, la prioridad es la salud de la mascota, pero la documentación inmediata es crucial. “Es fundamental documentar el estado en que se encuentra su perro”, explicó Portela, enfatizando la importancia de un registro detallado.
Entre la evidencia recomendada, se incluye:
- Registros de cita: “Solicitar copias o fotos del registro de cita, formulario firmado o boleta de servicio”.
- Explicación escrita: “Pedir explicación escrita de lo sucedido al lugar del grooming”.
- Evidencia visual: “Tomar fotografías o videos del estado físico del animal”.
- Informe veterinario: “Solicitar un informe médico veterinario, con diagnóstico y observaciones claras”.
- Testigos y comunicaciones: “Identificar testigos, guardar mensajes, facturas o cualquier comunicación del local, que pruebe el incidente”.
Plazos legales
Si bien el Código Civil establece plazos amplios para demandas civiles por daños y perjuicios (hasta diez años, según el artículo 1045), Portela recomienda no demorar en poner la denuncia.
“En la práctica es recomendable no dejar pasar tiempo, esto por la conservación de la prueba y los testimonios cuando aplique”, señaló la abogada.
Para casos de maltrato animal, la inmediatez es aún más vital. “Para denunciar un posible caso de maltrato, es recomendable presentarse de inmediato ante Senasa (Servicio Nacional de Salud Animal) o el Ministerio Público, si se presume crueldad o abuso grave”, indicando plazos de hasta diez años para penas de cárcel y dos para multas.
Derechos del propietario y reclamos
Más allá de la situación con el negocio, es importante considerar otras vías de reclamación. “Muchas empresas, entidades y aseguradoras ofrecen productos de seguro para mascotas, es importante dar aviso a estas, ya que podría tener derecho a realizar el reclamo por esta vía y que el seguro se subrogue el proceso”, comentó la abogada.
En cuanto a los tipos de daños que se pueden reclamar legalmente, se destacan los gastos médicos veterinarios derivados del incidente; el daño moral, si se prueba que el vínculo afectivo con la mascota fue afectado gravemente; la angustia emocional, en casos de muerte o lesiones permanentes; y el daño emergente y lucro cesante, si el animal tenía una función productiva o terapéutica demostrable.
Portela enfatizó en que “todo debe ser demostrado por quien los declara y es importante que nuestro reclamo se mantenga dentro de la proporcionalidad y la buena fe”.
¿Y si el negocio niega responsabilidad?
Si el establecimiento no asume su responsabilidad, el camino puede parecer desalentador. “Los procesos judiciales pueden ser desgastantes emocionalmente y requieren de una inversión financiera al menos inicial”, advirtió Portela.
Como paso previo, se sugiere buscar soluciones alternativas. “Se puede solicitar un proceso de mediación o conciliatoria previa”.
Si estas gestiones no son fructíferas, se puede intentar acudir al Juzgado Civil para presentar una demanda ordinaria de daños; acudir a la Oficina de Defensa del Consumidor, si existió publicidad engañosa o incumplimiento contractual; o la Fiscalía o Senasa, si existiera prueba de maltrato animal o condiciones más graves.

“El costo y complejidad depende de las instancias, el valor del profesional o los profesionales que intervengan para levantar la prueba o dar asesoría o valoraciones”, detalló Portela. Además, los procesos tienen un costo procesal relacionado con el valor de la pretensión.
En conclusión, aunque la situación es dolorosa, los propietarios de mascotas tienen derechos y vías legales para buscar justicia. La clave reside en la documentación exhaustiva y la acción oportuna.
Consejos legales clave para propietarios de mascotas
- Documente todo: Fotografías, videos, informes veterinarios y comunicaciones son cruciales.
- Actúe rápido: No demore la denuncia, especialmente en casos de maltrato.
- Conozca sus derechos: Desde gastos veterinarios hasta daño moral, los daños reclamables son variados.
- Considere mediación: Antes de un juicio, explore soluciones conciliatorias.
- Busque asesoría: Un profesional puede guiarlo a través de la complejidad legal.