Cuando se restituyan los sistemas informáticos se contará con tres días para presentar las declaraciones con los formularios correspondientes.
El resultado financiero al cierre del periodo, se resume en utilidad o pérdida y es a partir de ese resultado que iniciaremos a determinar la base imponible del impuesto a las utilidades.
Los criterios actuales de la administración desconocen la deducibilidad de estas partidas.
De aquí en adelante, hay que tomar en cuenta que los criterios se dividen en cuantitativos y cualitativos.
El artículo 9 bis, introdujo un límite a la deducibilidad de intereses no bancarios.
Luego de años de dudas, el 6 de enero anterior la Administración Tributaria publicó publicó un Criterio en el que estableció que será gravable o deducible el diferencial cambiario realizado durante el periodo fiscal.
Es importante que desde ya los emisores de tarjetas como obligados de percibir este impuesto se ocupen de implementar los cambios necesarios en sus sistemas y procesos, para que a partir del 1.º de agosto del presente año puedan cumplir con las obligaciones definidas en dicha resolución.
El próximo 15 de marzo vence el plazo para la presentación de la declaración del impuesto sobre la renta del periodo fiscal 2019, para aquellos contribuyentes cuyo año fiscal coincidía con el año calendario. Estos contribuyentes han tenido que lidiar con las normas de transición que fueron incluidas en la Ley de Fortalecimiento a las Finanzas Públicas.
La socia directora de Deloitte Costa Rica asumió su puesto el 1° de enero y afirmó que su gestión mantendrá la esencia de lo hecho por Alan Saborío y rechazó que se desarrollen políticas de equidad de género dentro de la empresa.
Desgraciadamente, la resolución en consulta sigue generando dudas y no resuelve muchas de las lagunas que se presentan. La resolución en un alto grado traslada a los proveedores de estos servicios y a las entidades financieras la mayoría de las responsabilidades para la aplicación de la norma.