El Banco Central de Costa Rica (BCCR) informó que mantendrá su Tasa de Política Monetaria en 3,50% anual.
Así lo anunció este 23 de octubre tras la séptima reunión de política monetaria de este año bajo decisión unánime de la Junta Directiva.
“Esta decisión se fundamenta en un análisis de la evolución reciente de la inflación, sus proyecciones y las de sus determinantes macroeconómicos, además de los riesgos internos y externos que podrían incidir en su trayectoria”, comentó el Banco al respecto.
El anuncio llega en un contexto donde la inflación general se ubicó en -1,0% interanual durante el mes pasado, mientras que los indicadores de inflación subyacente promediaron un 0,2%.
Ambos valores permanecen por debajo del rango meta del Banco Central (3,0% ± 1 punto porcentual).
En septiembre, el Central acordó reducir esta tasa en 25 puntos base y ubicarla en 3,50% anual. Además, en meses previos, el Central optó por postergar el ingreso de la inflación al rango de tolerancia alrededor de la meta con respecto a lo previsto en la reunión de política de julio.
Inflación continuaría en terreno negativo
Las proyecciones de corto plazo apuntan a que la inflación seguirá en números negativos durante el resto del año y los primeros meses del 2026.
Este comportamiento, según la entidad, responde a los efectos del choque climático ocurrido entre finales de 2024 e inicios de 2025, y no a la política monetaria.
En agosto, el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) creció un 4,8% interanual, con una aceleración en el régimen definitivo, que alcanzó el 2,8%.
Mercado laboral
El mercado laboral también presenta señales de mejora, con una disminución del desempleo y un aumento de los salarios reales.
No obstante, la participación laboral cayó levemente, un fenómeno que el Banco atribuye al envejecimiento poblacional y a decisiones familiares relacionadas con el cuido de personas dependientes, factores que exceden el ámbito de acción de la política monetaria.
En el plano internacional, el BCCR incorporó la revisión al alza en las proyecciones de crecimiento global anunciada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Según su análisis, dicha mejora se explica por el adelanto de compras e inventarios ante posibles barreras comerciales, aunque persiste una elevada incertidumbre por las tensiones geopolíticas y el impacto que los aranceles podrían tener sobre los precios al consumidor.
El Banco Central se comprometió a ajustar la TPM conforme evolucionen las condiciones macroeconómicas y riesgos.

