El Banco Central de Costa Rica (BCCR) pondrá en circulación, a partir del próximo 15 de octubre, los nuevos billetes de ¢1.000 y de ¢10.000 impresos en sustrato de polímero (material similar al plástico).
Con esto, las cinco denominaciones que componen la familia de billetes circularán en ese material. El de ¢1.000 circula en polímero desde el año 2011, pero ahora se ajustará a las nuevas características de seguridad y de diseño de las otras denominaciones.
LEA MÁS: Nuevos billetes empezarán a circular el 26 de noviembre
Asimismo, se mantienen los mismos personajes, motivos, tonalidades y tamaños de los billetes en papel de algodón que habían sido puestos en circulación a partir del año 2010.
Según indicó el BCCR, por medio de un comunicado de prensa, los billetes en sustrato de polímero son más duraderos, más seguros y 100% reciclables.
También, mantienen la estructura de seguridad que se identifica mediante el principio “toque, mire y gire”, que permite validar las seguridades al recibirlos.
“Es importante indicar que la denominación de ¢1.000 comparte las mismas seguridades que los billetes de ¢2.000 y ¢5.000. Asimismo, el de ¢10.000 presenta las mismas seguridades que el de ¢20.000″.
— BCCR.
Tal y como el billete de ¢20.000, el de ¢10.000 cuenta con una banda holográfica sobre la ventana transparente, en la cual se observan efectos como cambios de color en el escudo nacional y la sensación visual de relieve en el número diez, justo debajo del Escudo.
En la parte inferior del holograma, el texto “BCCR” cambia a “10 mil” al girar el billete. En el reverso, se presentan efectos multicolores en el perezoso.
Al igual que sucede con las denominaciones de ¢2.000, ¢5.000 y ¢20.000, los nuevos billetes de ¢1.000 y de ¢10.000 convivirán con los actuales como medio de pago hasta la fecha que el Banco Central establezca y que informará posteriormente.
Por otra parte, el Banco estableció las fechas a partir de las cuales los billetes de ¢2.000, ¢5.000, ¢20.000 y ¢50.000 —impresos en sustrato de algodón— perderán su valor como medio de pago.
Fecha | Detalle |
---|---|
1°. de enero del 2022 | Pierden su valor como medio de pago los billetes de ¢50.000 y los de ¢20.000, emitidos en papel algodón. |
1°. de marzo del 2022 | Pierden su valor como medio de pago los billetes de ¢5.000, emitidos en papel algodón. |
1°. de mayo del 2022 | Pierden su valor como medio de pago los billetes de ¢2.000, emitidos en papel algodón. |
Fuente: | BCCR. |
“A partir de las fechas antes indicadas, los referidos billetes deberán ser canjeados o depositados en las entidades financieras correspondientes”, precisó el BCCR.
LEA MÁS: Monedas conmemorativas: ‘documentos’ que marcan hitos de la historia
En noviembre de 2020, el BCCR había anunciado que partir del 26 de ese mes pondría en circulación los nuevos billetes, catalogados como “más seguros y de mayor calidad”.
La circulación del nuevo papel moneda se inició el 26 de noviembre con la denominación de ¢20.000. Para el 1°. de diciembre salieron los de ¢2.000 y ¢5.000; mientras que para el 2021 quedaron los de ¢1.000 y ¢10.000.
Pablo Villalobos, gerente interino del BCCR, aseguró que la introducción de estos nuevos billetes responde a un compromiso de la entidad por innovar y mejorar con tecnologías que sean, a su vez, amigables con el ambiente.
La moneda conmemorativa
El Banco Central presentó el 28 de setiembre del 2021, la moneda conmemorativa de los 200 años de independencia. Esta circulará a partir de noviembre, de manera regular entre la población.
La moneda es de ¢500, bimetálica y tiene un diámetro de 28 milímetros, por lo que es más pequeña que la actual.
Asimismo, tiene un espesor de 2,25 milímetros y pesa 10,5 gramos. Está compuesta de un núcleo plateado de cobre y níquel, y un anillo externo dorado de cobre, zinc y níquel, que conforman una sola pieza. Es fabricada con una aleación reciclable, y es fácilmente distinguible de las monedas actualmente en circulación.
En el anverso se destaca la función como medio de pago y presenta elementos como su denominación, barras en alto relieve facilitar el reconocimiento de la moneda a las personas con discapacidad visual y una imagen latente de alta seguridad que, al girar la moneda hacia los lados, se puede observar cómo cambia el valor “500″ por las siglas “BCCR”.
En su reverso la moneda incorpora la leyenda “200 años de Independencia” así como las palabras “libertad, paz y democracia”. En el centro, la pieza tiene una antorcha alegórica al proceso de independencia.
Otro de los elementos diferenciadores de esta pieza —con otras más antiguas— es que por primera vez en la historia numismática costarricense se incluye en el mapa a la Isla del Coco.
Marvin Alvarado, director del departamento de emisión y valores del BCCR, explicó que la nueva moneda de ¢500 convivirá con la que se utiliza actualmente, que poco a poco irá dejando de circular.
Alvarado dijo que el costo de fabricación de cada moneda es de alrededor de ¢88 y tiene las particularidades de seguridad de última generación contra la falsificación.