Atrás va quedando la figura de Rubén Pacheco Lutz como impulsor y fundador del consorcio empresarial hotelero Enjoy Group, que dio vida a marcas como Fiesta, Doubletree, Hilton y Palma Real.
El cambio generacional llegó y con él una nueva visión de negocios está tomando forma de la mano de sus tres hijos –Rubén, Javier y Andrés–, de una experta desarrolladora de marcas y mercados, y de nuevos aliados.
Hace dos años, Pacheco decidió delegar funciones a sus sucesores, quienes han venido elaborando un plan de negocios que deja atrás el desarrollo y administración de grandes hoteles, para dar paso a un proyecto de aquí al 2020, que incluye abrir al menos 10 hoteles tipo boutique y madurar marcas de restaurantes “casuales” y gourmet .
De hecho, Enjoy Group vendió sus acciones de los hoteles grandes como el Hilton, Doubletree y Palma Real y se quedó con una participación minoritaria.
Sus personeros aseguran que la operación de estos hoteles fue propio de la primera generación y que no será parte del negocio ni hoy ni en el futuro.
La apuesta es madurar primero marca propia y luego si cabe la posibilidad, atraer franquicias.
Embajadora por Miami
Una de las responsables de este viraje es Cristina Jones, costarricense quien vivió década y media en Estados Unidos, y cuya experiencia se formó de la mano con los creadores del formato boutique y quien lideró el proyecto de transformar la casa de Donatella Versage en un hotel.
Jones explicó que una de las iniciativas en proceso es la franquicia P. F. Chang’s, un restaurante tipo bistró (pequeño negocio masivo para después de la oficina).
Enjoy Group tiene el derecho de explotación para toda Centroamérica y, según detalló su director regional, Sean Wagner, comenzarán en Panamá, con la apertura del primer local en marzo del 2014. Le seguirá Costa Rica y otro en Guatemala.
En agosto pasado, el grupo asumió la operación del Restaurante Filo, en Momentum Lindora.
La división de restaurantes involucra también a la marca Actitud Buenos Aires y Terruño. Esta unidad será lanzada formalmente a final de año, y ya anuncia la incorporación de dos locales más, que ya existen pero sufrirán un reposicionamiento.
En total, será cinco restaurantes para este año.
“Regresé a Costa Rica con la misión de darle forma al plan de hoteles boutique y restaurantes del grupo. Cada uno será independiente en cuanto a experiencias y estarán ubicados en los diferentes destinos turísticos del país”, aseveró Jones.
Ella también tiene un segundo sombrero, pues el estado de Florida la designó embajadora de turismo de Miami para Centroamérica; esta ciudad es el destino número 10 para los ticos.
Su gestión es la de ser puente entre tur operadores, agencias de viajes y en general, promover el destino.
10 al 2020
La propuesta de abrir al menos 10 hoteles boutique en los próximos siete años arrancará con el complejo Mangroove en enero del 2014, en playa Panamá, con una inversión de $30 millones.
El resto se distribuirá entre playa, montaña, aventura y ciudad, y todos se manejarán con el formato de hoteles de circuito.
Jones aseguró que uno de los objetivos es atraer a celebridades que quieran pasar inadvertidos en un lugar pequeño pero lujoso. Tendrán entre 60 y 120 habitaciones aunque unos cuantos podrían rondar los 27 cuartos.
Es un formato por el que muchas empresas están apostando. Por ejemplo, Portafolio Inmobiliario –desarrollador de Avenida Escazú– levantará uno de 100 habitaciones que estará listo en el 2015.
Grupo Pellas planea abrir un complejo turístico, dentro del cual habría un hotel boutique en playa El Jobo, en La Cruz de Guanacaste.
En junio del año pasado, igualmente abrió sus puertas Luz de Luna en San José con apenas 12 habitaciones.
Studio Hotel, en Santa Ana, es otro ejemplo de este género como también lo Rancho Margot, en la zona norte del país y todos los que operan bajo la sombrilla de Cayuga Sustainable Hospitality: Lapa Ríos Ecolodge, The Harmony, Arenas del Mar, Finca Rosa Blanca, Latitude 10 Resort, Jícaro Island Ecolodge, Grano de Oro, Hacienda Tayutic y Kurá Design Villas.
P. F. Chang’s
Comida asiática: La cadena de restaurantes P. F. Chang’s nació como una franquicia especializada en comida china y asiática.
En la región: Con la llegada de la franquicia, se montó un plan de expansión que abarca unos 45 puntos de venta, entre los cuales habrá 10 en Costa Rica, de tamaño pequeño con capacidad para 80 y 100 asientos. Los de Panamá serán más grandes: de 300 asientos. El plazo es entre tres y cuatro años. Para el resto de la región se repartirán entre 20 y 25 establecimientos.
Inversión: La inversión proyectada para la región supera los $20 millones; solo en Costa Rica superará los $8 millones. Se estima que cada restaurante implicará una inversión de $3 millones.
Fuente Sean Wagner, director regional.