
Hace seis años, Industrias Martec empezó a nadar contra la corriente al dedicarse a la producción de pargo en escala industrial, una labor poco conocida dentro y fuera de nuestras fronteras.
Usar la acuicultura es más frecuente en la producción de tilapia en el caso de Costa Rica, mientras que, en otros países, es usada para la comercialización de salmón.
Martec ve en el pargo una gran oportunidad de negocio al ser un pescado de fácil aceptación, pues es muy consumido en el hemisferio norte, y sobre todo, que nadie más lo produce en gran cantidad.

Robert Miles, presidente y fundador de la firma, mencionó que esperan alcanzar una capacidad total de 19 millones de pargos en el agua, una cifra aún lejana debido a que a prevé tener 2 millones a finales de enero del 2016.
Con el fin de acelerar su crecimiento, la compañía decidió vender un 20% de su capital, una decisión que no les permitirá llegar a su meta, pero que los llevará a su punto de equilibrio en aproximadamente unos dos años.
En ese proceso, contaron con el respaldo de Kairos Investments, firma que brinda servicios de banca de inversión y que, después del proceso, quedó con una participación del 0,5% junto a tres inversionistas de capital privado.

“La acuicultura es el futuro. Costa Rica tiene más espacio de mar que de tierra por lo que se debe aprovechar de forma eficiente y sostenible”, aseguró Patrick Roulet, socio de Kairos.
La cosecha actual de la empresa es de unos 5.000 kilos a la semana y la mayoría son exportados a Estados Unidos y una menor cantidad se queda en el país o se envía a Canadá.
Datos suministrados por Procomer muestran que las exportaciones de pargo crecieron un 9%, pasando d de $5,4 millones en 2012 a $5,9 millones durante el 2014.
La Promotora también confirmó que Martec es la firma pionera en el uso de acuicultura para el cultivo de pargo. No obstante, hay otras empresas exportadoras como Smalley Development, PTM, Imarai A y Frumar.
Negocio marítimo
Martec empezó operaciones hace 35 años y, además de dedicarse al cultivo de pargo, procesa y vende otras especies como el atún, el pez dorado y el pez espada.
El fundador de la compañía indicó que compran el pescado del pescador de la costa, lo procesan, lo filetean y lo posicionan en restaurantes y supermercados.
Actualmente, la compañía está exportando el 80% de lo que procesa en su planta ubicada en Quepos, y el mercado estadounidense es el más importante.
“Lo colocamos en varias zonas de los Estados Unidos, como Dallas, Miami, Tampa, Los Ángeles, Houston y otros”, dijo Miles.
Hasta el momento, las ventas anuales alcanzan $30 millones.
El impacto de la venta del pargo en esos ingresos ahora son mínimos (cerca del 5%) pero vislumbran que esa división hará que en el futuro los números de la empresa se tripliquen.
¿Por qué están seguros del éxito? El pargo resulta una especie de fácil aceptación pero uno de los aspectos más importantes para la firma es la cercanía con uno de los principales consumidores de pescado del mundo, Estados Unidos.
Sumado a esto, existen varias condiciones que hacen de Costa Rica un lugar ideal para el acuacultivo de esta especie de pez.
“Gran parte de las ventas se hace fresco y, si se está muy lejos, pierde competitividad en precio. Además, aquí no hay huracanes o tormentas en la costa y donde están las jaulas, hay una buena circulación del agua, lo que facilita el cultivo”, explicó Roulet.
Asimismo, el cultivo se beneficia debido a que en suelo nacional hay varias empresas que hacen alimento para pescado, lo que baja los costos del procedimiento.
Guiados con la visión de que es un negocio con gran potencial, la firma invirtió $20 millones en los últimos seis años, recibiendo apoyo financiero de entidades bancarias como el Banco de Costa Rica, el Banco Nacional y otros.
Para la compañía, es claro que deben alcanzar ahora un nivel de madurez que no solo les permita atraer a grandes jugadores globales, sino que también puedan desarrollar el mismo proceso pero con otras especies de peces con un nivel similar al pargo.
“Hoy por hoy, el pargo es único, aún hay mucho espacio para seguir cultivándolo. Pero hay otras especies que también podrían ser cultivadas. Cuando uno mira la historia de la industria, se da cuenta de que, o te vuelves grande o si no serás tragado por un grande”, dijo Roulet.
Industrias Martec tiene cerca de 350 colaboradores, de los cuales 35 trabajan en el laboratorio y 45 en las fincas de agua.
El proceso
Martec desarrolla un proceso de cultivo de más de 12 meses.
1
Padrotes: Son peces adultos capaces de procrearse y provienen del medio marino. En el laboratorio, son desinfectados y mantenidos en óptimas condiciones ambientales y nutricionales para obtener desoves de buena calidad.
2
Alevines: Estos pueden considerarse como los ‘huevitos del pargo’ y se mantiene en el laboratorio cerca de dos meses.
3
Crecimiento: Después de que los peces estén en el laboratorio durante dos meses, los llevan a las fincas en el mar donde son alimentados y se mantienen de 10 a 12 meses.
4
Exportación: Tras ser cultivado, el pescado es procesado y vendido en su mayoría a restaurantes y supermercados en Estados Unidos.
Fuente Martec.