La denuncia del ataque de un perro de raza pitbull a un niño de 7 años, ocurrido el pasado sábado 9 de agosto en las instalaciones de Multiplaza Escazú, desató una intensa discusión en redes sociales y medios de comunicación sobre la seguridad en los comercios que se declaran pet friendly.
La denuncia fue hecha pública por la madre del menor, quien no solo relató el incidente, sino que también cuestionó directamente la respuesta del centro comercial.
Sus principales quejas se centraron en la aparente falta de protocolos de emergencia para atender la situación y en una supuesta demora de casi 30 minutos para la llegada de la asistencia médica.
El caso puso sobre la mesa un debate legal más profundo: la responsabilidad compartida (responsabilidad solidaria) que, según expertos, asumen los establecimientos al permitir el ingreso de mascotas a sus instalaciones.
La opinión pública esperaba una respuesta del centro comercial que aclarara no solo su versión de los hechos, sino también si se implementarían cambios en su política pet friendly para evitar futuros incidentes.

Este lunes por la tarde, tres días después del suceso, el centro comercial se pronunció a través de un comunicado oficial.
En el texto, Multiplaza asegura que “lamentamos profundamente el incidente ocurrido (...) que afectó a una familia visitante” y afirma que “desde el primer momento, nuestro equipo brindó acompañamiento y apoyo directo a las personas involucradas”.
El comunicado califica el hecho como “aislado” y reitera que “la seguridad y el bienestar de nuestros visitantes son nuestra más alta prioridad”. Por ello, “reforzamos nuestro compromiso de seguir trabajando para que cada experiencia en nuestro centro comercial sea segura y agradable”, añade el comunicado.
El texto no hace referencia explícita a las quejas específicas de la madre sobre la supuesta lentitud en la activación de los protocolos de emergencia.
Tampoco detalla si el centro comercial tomará medidas para identificar al dueño del perro, quien, según la denuncia, se retiró del lugar sin asumir su responsabilidad.
El comunicado no anuncia ninguna revisión o cambio específico en su política pet friendly, como la exigencia de bozales para ciertas razas o la implementación de nuevos protocolos de seguridad para prevenir que un incidente similar se repita.