
La puesta en marcha de una caldera que produce energía de biomasa, tras la quema de pequeños trozos hechos a base de restos de madera ( pellets ), es la acción más reciente de Bridgestone de Costa Rica en el afán de aumentar su eficiencia energética.
Esta tecnología, que requirió una inversión de aproximadamente $2 millones, supone el ahorro de hasta 11.000 litros de búnker diarios y disminuirá hasta en un 50% las emisiones de dióxido de carbono de la compañía.
Así como Bridgestone, otras empresas suman esfuerzos para ser más eficientes energéticamente. Una decisión que no solo reduce sus costos de operación sino que aporta un granito de arena en pro de alcanzar la meta país de ser carbononeutral en 2021.

Abbott Vascular Costa Rica, Hotel El Tramonto, la cadena de hoteles Cayuga Sustainable Hospitalit, Pops y el Hospital Clínica Bíblica, engrosan la lista de firmas que toman medidas para disminuir el consumo de energía.
Dicho objetivo lo logran al tomar en cuenta algunos aspectos como la utilización de paneles solares, luminarias LED, biodigestores, aires acondicionados regulados y al poseer estructuras que aprovechan lo más posible la ventilación e iluminación natural.
En el caso de Bridgestone, aparte de su nueva caldera, también emplea la vulcanización con nitrógeno (proceso que hace que el caucho se vuelva más duro), creó un programa interno de ahorro y conservación de energía e instaló paneles solares para las oficinas y parqueos.
Erick Herrera, director de operaciones de Bridgestone de Costa Rica, mencionó que cuentan con alrededor de 150 paneles que le ahorran a la compañía aproximadamente $10.000.
Por su parte, Abbott Vascular de Costa Rica desarrolló un plan de administración y gestión energética enfocado en las fuentes de más alto consumo: los sistemas de aire acondicionado, aire comprimido e iluminación.
Ante esto, la empresa –que produce dispositivos para controlar padecimientos cardiovasculares– reemplazó las bombillas fluorescentes por luces LED e instaló controles de funcionamiento para los aires acondicionados y las luminarias.
“También se han optimatizado los parámetros de operación de los sistemas de aire comprimido para trabajar en los puntos de mayor eficiencia. Estas actividades nos han permitido reducir el consumo”, señaló Andrew NcNiven, director de la firma.
Estas medidas redujeron la facturación eléctrica en un 17% y esperan el próximo año alcanzar un 20% tras poner en funcionamiento dos proyectos más. Asimismo, han identificado cerca de 15 ideas que serán evaluadas.
Turismo no se queda atrás
El nuevo hotel Tramonto, ubicado en Playa Hermosa de Jacó, y la cadena de hoteles Cayuga Sustainable Hospitality, son ejemplo de los esfuerzos que están realizando firmas del sector turismo para ser más sostenibles en sus operaciones.
La primera, que abrió sus puertas este mes, instaló 20 paneles solares que sirven para calentar el agua del hotel.
Asimismo, pretende instalar un sistema solar fotovoltaico de 234 paneles con lo que producirían el 100% de la energía que requiere el proyecto.
Otras de las medidas es el uso de luces LED que ahorran un 75% de energía con respecto a los bombillos tradicionales y la instalación de un sistema de aire acondicionado que consume un 40% menos de energía.
También todas las ventanas del hotel poseen un sistema de control solar, lo cual contribuye con la temperatura interna y logra una mayor eficiencia en el aire acondicionado. Esto requirió una inversión de $60.000.
En el caso de Cayuga, que posee ocho complejos hoteleros, se están implementando desde medidas simples, como no lavar diariamente la ropa de cama si no cada tres días o a petición del huésped, hasta el uso de un biodigestor (equipo que convierte desechos orgánicos en gas metano).
Hans Pfister, presidente de Cayuga Sustainable Hospitality, mencionó que la eficiencia energética es solo una de las áreas que conforman el concepto integral de sostenibilidad en el que se desarrolla cada uno de los hoteles que pertenecen a la cadena.
Otros que buscan la eficiencia
Pops es otra de las compañías que procura disminuir su consumo energético, por lo que en setiembre pasado, pusieron a operar paneles solares en sus heladerías ubicadas en La Garita y Fantasía de Alajuela.
En cada heladería, se instalaron 42 paneles para lo que se requirió una inversión aproximada de $25.000 por local. Con esto, la firma estima ahorrar alrededor de $3.500 anuales en cada uno de los establecimientos.
Carlos Abreu, presidente de Pops, explicó que planean continuar en esa dirección e incorporar más heladerías a ese proceso. También, se encuentran realizando un estudio de sus equipos con el fin de identificar cuáles marcas y modelos son los más eficientes para seguir utilizándolos.
El Hospital Clínica Bíblica, que posee la marca C-Neutral, también está redoblando esfuerzos para aumentar sus niveles de eficiencia, por lo que recientemente incrementó la cantidad de paneles solares de 15 a 24 (este proyecto requirió de una inversión de alrededor de $40.000).
Estos generan un ahorro de 3.600 litros al año de Gas LP que se ha dejado de usar en el proceso de calentamiento de agua.
Otras de las disposiciones implementadas son tener sensores de iluminación y luminarias eficientes. Actualmente, están analizando el uso de los aires acondicionados.