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Toda empresa –sin importar su tamaño- genera ciertos niveles de contaminación ambiental. Pero, hay una serie de medidas que se pueden tomar para disminuir el impacto y que, además, le pueden ayudar a ser más eficiente.
¿Cuál es el nivel de responsabilidad de su empresa frente al medio ambiente?
Le contamos de algunas opciones que puede poner en práctica.
1. Recicle
Quizás una de las prácticas más sencillas es instalar recipientes para dividir los desechos y así reciclarlos.
Es importante incentivar a los empleados de su empresa a reciclar y a utilizar correctamente estos recipientes, ya que muchas veces estos se instalan, pero se usan mal pues no se respetan las clasificaciones.
“Tampoco se trata de manejar 25 recipientes para todos los materiales, puedes clasificarlo por categorías. Incluso con tres categorías queda súper bien organizado”, manifestó Carlos Andrés Rincón, gerente general de la empresa Ecoway Servicios Ambientales.
Hoy día no hay excusa válida para no reciclar, pues existen una mayor cantidad de centros de acopio y constantemente se realizan campañas de reciclaje.
Incluso, si los materiales reciclados son considerables, podría venderlos y así obtener ganancias.
2. Ahorre y reutilice el agua
Jorge Herrera, subdirector de la Escuela de Ciencias Ambientales de la Universidad Nacional, aconsejó a las empresas evaluar bien sus procesos de manejo de agua y verificar si están consumiendo una cantidad adecuada de agua o no.
“Las empresas deben valorar la reutilización del agua. Si el agua, después de haberla utilizado, cumple con características como para volverla a utilizar en el proceso, entonces se debe usar una misma cantidad de agua varias veces en el mismo proceso antes de ser descartada”, propuso el subdirector.
También recomendó utilizar válvulas o dispensadores que eviten el desperdicio de este líquido.
“Por ejemplo, hay válvulas que están abiertas para dispensar una cierta cantidad de agua y que evitan que se vayan a dar desperdicios en el sistema. Es algo similar a lo que se usa en ciertos baños de restaurantes, en los que usted oprime la llave y sale una cantidad de agua y después de cierto tiempo se cierra. A nivel industrial, hay dispositivos de este tipo”, explicó Herrera.
3. Disminuya el uso de bolsas plásticas
Carlos Andrés Rincón recordó que lo ideal es no producir ciertos residuos, por lo que recomendó evitar el consumo de bolsas plásticas.
Por ejemplo, si se adquieren productos de tamaño pequeño, no hay necesidad de pedir bolsas, pues perfectamente se pueden cargar en la mano o, si se emplea bolso, llevarlos en él.
4. No bote sustancias por la pila o por el fregadero
En ocasiones, las empresas utilizan sustancias que quizás no son peligrosas en sí (para lo cual existen reglamentos para su manejo), pero que pueden generar contaminación.
Rincón recomendó no botarlas por el fregadero o la pila, sino almacenarlas y dárselas a una empresa para que esta las gestione correctamente.
5. Use luminarias de bajo consumo y aproveche la luz del sol
Rincón sugirió el uso de bombillos fluorescentes, que duran más y consumen menos que los incandescentes y, cuando ya cumplan su vida útil, entregárselos a un profesional que los sepa administrar y desechar a través de un proceso que no contamine.
Por su parte, Jorge Herrera recomendó el uso de luminarias LED.
También se aconseja aprovechar más la luz solar en el ambiente de la oficina y emplear la luz eléctrica solo cuando sea estrictamente necesario.
6. Analice renovar su equipo por uno más eficiente
Herrera recomendó buscar un asesor que le ayude a identificar qué equipos de su empresa consumen más electricidad, qué tan antiguos son y cuál es la eficiencia con la que están trabajando.
Esto permitirá determinar si ya es hora de renovarlos por unos más eficientes, lo cual le puede generar un ahorro importante.
7. Prefiera la materia prima que sea amigable con el ambiente
Jorge Herrera recomendó escoger aquella materia prima que sea más ecológica y tratar de reutilizar los recipientes en los que viene esta.
“Se debe favorecer la compra de materia prima en la que haya criterios adecuados de empaque y embalaje. Por ejemplo, que cuando yo vaya a escoger entre tres marcas de un mismo producto que yo necesite, que yo vaya a favorecer a aquella en la que el empaque donde viene la materia prima genere la menor cantidad de residuos posibles”, planteó Herrera.
