Se trata de automóviles, camiones y autobuses que están equipados con aparatos que les permitirán hablar entre sí en tiempo real usando Internet, según explicó el Departamento de Transporte de EE. UU. en un comunicado de prensa.
Con ello, el gobierno estadounidense dispondrá de una gran cantidad de datos sobre la operatividad sistema y los mecanismos para reducir accidentes en las carreteras.
“Hoy es un gran momento para la seguridad del automóvil”, expresó Ray LaHood, Secretario de Transporte.
“Esta tecnología de vanguardia ofrece una promesa real para mejorar la seguridad y la eficacia de las carreteras. Esa es una combinación ganadora para los conductores”, añadió.
El proyecto es dirigido por el Instituto de Investigación del Transporte de la Universidad de Michigan y es la segunda fase de un modelo piloto de conexión máquina a máquina de seguridad de vehículos desarrollado por la National Highway Traffic Safety Administration.