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Robots que fueron diseñados y programados para contribuir con el medio ambiente es lo que se respira al entrar este sábado 11 de noviembre en la Olimpiada Mundial de Robótica que se lleva a cabo por primera vez en Costa Rica.
El centro de eventos Parque Viva recibe este fin de semana a más de 2.500 personas de 60 delegaciones de todo el mundo.
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La Olimpiada Mundial de Robótica es un evento que tiene como objetivo unir a niños, jóvenes y adultos para desarrollar su creatividad y habilidades de resolución de problemas a través de la creación de robots.
Los retos de cada Olimpiada dependen de la temática que quiera desarrollar cada anfitrión; para esta ocasión, Costa Rica decidió que el eje central de esta competición son los “Suistainabots”, que son robots que ayudan a la sostenibilidad, la conservación ambiental.
La Olimpiada está clasificada por categorías: la universitaria, en la que los participantes acumulan puntos por acomodar piezas de tetris; la open, una especie de feria científica en la que los estudiantes exponen un problema y una solución sostenible que dieron a través de un robot; y la de fútbol, en la que los robots tienen que anotarle goles a su rival.
Los robots que están presentes en la Olimpiada son prototipos que fueron construidos con piezas de Lego Mindstorms y para la categoría universitaria utilizaron materiales más avanzados.
Representación costarricense
La representación de Costa Rica está compuesta por 16 equipos que participan en todas las categorías. Ellos fueron seleccionados durante la Olimpiada Nacional de Robótica que se efectuó el 12 y 13 de agosto anterior en la Universidad de Costa Rica (UCR).
Los institutos nacionales que están presentes en la Olimpiada son Boston Scientific, VLTraining and IT Consulting, Fundavida, Colegio Saint Francis, Colegio Técnico Profesional Rosario de Naranjo, Talenttec, Instituto Nacional de Aprendizaje, Colegio Técnico Profesional de San Carlos, Escuela Presbítero Manuel Bernardo Gómez, ETA Academy y el Colegio Técnico Profesional de Platanar.
Carlos Manuel Navarro (12 años) y José Daniel Chaves (13 años) son de Liberia, Guanacaste y ganaron la categoría de niños en la Olimpiada Nacional, mérito por el cual ahora están presentes en este evento internacional.
Estos niños desarrollan un dron que tiene como objetivo detectar incendios forestales.
Actualmente, este trabajo se realiza de forma manual con vigilantes que monitorean con binóculos las zonas afectadas por el fuego. Los tiempos de reacción pueden ser de hasta cuatro horas, pero con este dron se puede disminuir a minutos.
El dron trabajaría con cámaras térmicas de largo alcance y con visión de 360 grados, que se alimente de energía extraída de paneles solares.
Según Navarro y Chaves, en el momento en que las cámaras detecten indicios de fuego, el dron se activa y puede enviar las coordenadas en tiempo real para que las autoridades puedan dar respuesta de inmediata.
El Colegio Técnico Profesional de Platanar también tiene su representación y en este caso se trata de un robot que trabaja con energías limpias y que permitirá realizar plantaciones y extraer cultivos.
Rodrigo Solís, competidor del Colegio de Platanar, comentó que el robot puede trabajar con abonos orgánicos y su objetivo es reemplazar la maquinaria que se usa hoy día en la agricultura y que es contaminante.
Así como minimizar la cantidad de personas que trabajan en el campo y que están expuestos a enfermedades como el cáncer de piel.
Se espera que el robot sea de 1 metro por 1 metro y que pueda guiarse a través de GPS, es decir, está planeado para que su conducción sea autónoma.
“La oportunidad que vemos con esta Olimpiada es que la robótica no es solo con fines de construcción o industria, sino una herramienta que se puede adaptar a la conservación de los ecosistemas”, acotó Solís.
La Olimpiada Mundial de Robótica concluirá este 12 de noviembre. La entrada es gratuita para todo público.
