Según la Encuesta Nacional de Hogares del 2017, el 80% del ingreso de los hogares costarricenses proviene del trabajo y de este poco más del 60% proviene del salario. Es decir, el trabajo remunerado es el principal ingreso del ciudadano costarricense. Este ingreso soporta un impuesto el cual es muy importante entender con claridad.
Precisamente, no todos los trabajadores deben cancelar el tributo. Únicamente son obligados aquellos que reciben un salario superior al mínimo exento (libre de impuesto) establecido por la ley. De esta forma, para el periodo fiscal 2018, si usted recibe un salario menor de ₡799.000 no tiene obligación de pagar impuesto alguno. Sobre el exceso de ₡799.000 y hasta ₡1.199.000 debe pagar el 10% de su salario. Por último, en el caso de tener un sueldo superior a ₡1.199.000 debe cancelar el 15% del exceso correspondiente.
¿Cómo se paga el impuesto? El patrono debe calcular y retener el tributo cuando hace el pago del salario al trabajador. Las sumas correspondientes son posteriormente transferidas al Estado. Es obligación de todo patrono realizar la retención, en caso contrario, asume la responsabilidad sobre los montos no cancelados al Fisco.
No todos los ingresos del trabajador pagan impuesto de renta. El aguinaldo, el salario escolar y las indemnizaciones como la cesantía no tienen esta imposición.
En Costa Rica si es posible realizar una reducción de este impuesto, es decir, aplicar un crédito fiscal. La ley establece la posibilidad del trabajador de aplicarse créditos fiscales familiares, sobre el pago del tributo. Justamente, para el periodo 2018, por cada hijo el trabajador puede aplicarse ₡1.500 mensuales. En caso que el trabajador sea casado, puede aplicarse un crédito de ₡2.240 por su cónyuge. En el supuesto que ambos cónyuges sean trabajadores, únicamente uno de ellos se podrá aplicar el crédito.
Estos son montos que establece el mismo Ministerio de Hacienda. Algunos pensaremos que no son muy representativos y justos. ¿Usted qué piensa?
Gerente de Impuestos de Deloitte. Junto a Manrique Blen, escribe el blog #TributarioCR de El Financiero.
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