El PIB (Producto Interior Bruto) ruso aumentó un 10,3% en el segundo trimestre en comparación con el mismo periodo de 2020, cuando la economía se vio muy golpeada por la pandemia de covid-19, de acuerdo a cifras oficiales publicadas este viernes.
Esta primera estimación, brindada por la agencia de estadísticas Rosstat, demuestra la recuperación de la economía rusa, tras una caída del 0,7% del PIB durante el primer trimestre sobre un año (revisado al alza tras el -1,0% anunciado en un principio).
De una manera general, la economía rusa se mantuvo relativamente a salvo de la pandemia en 2020 (el PIB cayó sólo un 3,1%) merced a la decisión de no confinar al país nuevamente tras la primera oleada de covid-19.
Entre los sectores más importantes para esta recuperación destacan los transportes de pasajeros (+250,0%), el comercio minorista (+23,5%) y el sector de la minería (+7,8%).
Luego de un solo confinamiento durante la primavera (boreal) de 2020, Moscú decidió mantener su economía abierta.
Entonces, esto tuvo como resultado una caída del PIB menor a la esperada por las autoridades, mucho más baja que en Europa, donde muchas economías sufrieron contracciones más brutales, agravadas por medidas de confinamiento más largas y repetidas a fin de año.
En cambio, en Rusia, los últimos meses estuvieron marcados por una inflación galopante, sobre todo en los precios de los alimentos básicos, lo que preocupa a la cúpula del Estado en este periodo previo a las elecciones legislativas de septiembre.
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