El comportamiento de la economía y el de los negocios van de la mano, pero el impacto del crecimiento o el decrecimiento de las actividades productivas impacta de forma distinta según el tipo de compañía. De hecho, las más afectadas son las pequeñas y las medianas empresas.
Los datos de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), a junio de cada año y publicados recientemente por la Dirección Actuarial y Económica, muestran el comportamiento heterogéneo según los patronos que reportan sus planillas y por actividad económica.
El Área de Estadística de esa Dirección registra como:
Microempresas: a las que reportan planillas de 1 a 5 personas.
Pequeñas empresas: tienen entre 6 y 30 empleados.
Medianas empresas: son las que reportan entre 31 y 99 colaboradores.
Grandes empresas: son las que tienen de 100 empleados en adelante.
No se contabilizan aquí las unidades productivas en diferentes actividades que se encuentran en el sector informal, donde se estima que se encuentra el 38% de la población económicamente activa, según el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y del Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Evolución económica
El informe mensual de coyuntura económica del Banco Central de Costa Rica (BCCR) sostiene que la producción mantiene “un ritmo de crecimiento sólido” con el impulso de los regímenes especiales y de la industria manufacturera de zona franca, de implementos médicos, y de fabricación de productos metálicos, maquinaria, equipo y productos alimenticios.
El régimen definitivo creció menos por el menor crecimiento de la construcción con destino privado (principalmente de proyectos residenciales), la caída de la actividad agrícola debido a factores climáticos adversos y el descenso de la manufactura local, en especial en la industria alimentaria y de artículos de papel.
No es muy diferente al panorama que se tiene en los últimos años, excepto por el ingrediente de la incertidumbre global debido a las medidas arancelarias y los cambios repentinos en materia económica de la Administración Trump, que afectan el consumo en Estados Unidos y las exportaciones desde Costa Rica, entre otros países.
Las cámaras empresariales apuntan a la necesidad de mejorar la competitividad del país.
La Cámara de Industrias de Costa Rica señaló las prioridades que consideran deben atenderse con urgencia: tipo de cambio, calidad y disponibilidad del talento humano, peso de las cargas sociales, listas de espera y la sostenibilidad del régimen de Invalidez, Vejez y Muerte en la CCSS.
Además: inseguridad, costo de la energía, modernización de puertos, carreteras y puestos fronterizos, homologación de registros sanitarios y agilización de trámites, innovación, incentivos para la producción y una estrategia nacional de internacionalización más profunda y diversificada.
La Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (Cacia) también apuntó a similares prioridades y urgió por una política comercial a nivel regional, a continuar la modernización tecnológica en el Estado y de la infraestructura, y a medidas que ayuden a disminuir los costos en las empresas.
Según este gremio, la mayoría de los empresarios de la industria alimentaria describen el presente 2025 como un año muy duro en ventas, con un mercado interno muy lento, especialmente durante el primer semestre de 2025, y un consumidor más cuidadoso en sus gastos.
Cambios por sector y actividad
Parque empresarial
La cantidad de empresas registradas ante la Caja creció 5% en este 2025, más que en 2024. Son casi 4.000 empresas más que enviaron sus planillas a la institución.
Los mayores incrementos se observan en actividades inmobiliarias empresariales y de alquiler, construcción y hoteles y restaurantes, en este último caso a pesar de las dificultades del turismo.
El crecimiento del parque empresarial podría ir en concordancia con los proyectos de inversión anunciados durante el presente año, así como de emprendimientos y pequeños negocios.
Microempresas
En Costa Rica, más de 60.000 empresas con menos de 5 personas envían sus planillas a la Caja.
En este 2025 las microempresas aumentaron casi 13%, mucho más que un año atrás.
En especial, aumentaron en actividades de salud y servicios sociales, construcción y hoteles y restaurantes.
También crecieron microempresas de electricidad, gas y agua, seguidas de pesca y de comercio y reparación de vehículos.
Donde menos crecieron las microempresas fue en agricultura, intermediación financiera y actividades inmobiliarias empresariales y de alquiler.
Pequeñas empresas
Las pequeñas empresas, con planillas de 6 a 30 personas, decrecieron 14% entre junio de 2024 y el mismo mes de 2025, después de haber crecido apenas 3%.
Pasaron de más de 19.000 pequeñas empresas en 2023 y 2024 a unas 17.000 en 2025.
En este tipo de empresas se registran decrecimientos en todas las actividades, en particular en actividades de hoteles y restaurantes, inmobiliarias y oficinas, y pesca.
Otros decrecimientos significativos fueron en electricidad, gas y agua, explotación de minas y canteras, y agricultura, caza y silvicultura.
El análisis en cifras absolutas revela un fenómeno de atomización del parque empresarial. Si bien la pérdida de 2.000 pequeñas empresas (unidades de 6 a 30 empleados) podría explicar una parte del aumento en el segmento micro por reducción de planillas, el crecimiento de más de 7.000 nuevas microempresas apunta a una realidad distinta: la economía está generando masivamente unidades de subsistencia (de 1 a 5 personas). Estamos ante un tejido productivo que gana volumen en su base más frágil, pero que pierde “músculo intermedio”, precisamente donde se suele generar empleo más estable y con mayor capacidad de escala.
Medianas empresas
Las empresas con planillas de 31 a 99 personas, clasificadas como medianas, tuvieron un leve descenso, después de haber crecido un año antes.
Tocaron techo en 2024 con 3.431, pero en este 2025 descendieron a menos de 3.400.
Los principales decrecimientos de empresas medianas a junio de 2025 ocurrieron en agricultura, enseñanza y manufactura. En electricidad, gas y agua la caída porcentual es mayor, aunque se trata de tres empresas menos.
Crecieron las empresas medianas de servicios sociales y salud, así como de transporte, almacenamiento y comunicaciones.
Grandes empresas
Después de haber aumentado 4% entre 2023 y 2024, las grandes empresas (con planillas superiores a 100 personas) apenas registran un aumento del 0,6%. Son 10 empresas más.
Durante los últimos tres años las grandes empresas oscilan entre 1.500 a 1.600 en Costa Rica.
El segmento de grandes empresas muestra incrementos destacados en enseñanza, actividades inmobiliarias y oficinas, y explotación de minas y canteras (donde hay una empresa más).
Decrecieron las grandes empresas en agricultura, manufactura, construcción y hoteles y restaurantes.
