La intención del Gobierno de replicar el éxito de los dispositivos médicos en el sector de semiconductores enfrenta un giro inesperado: la salida de dos compañías emblema del ecosistema de chips.
La retirada de Qorvo y el traslado del Centro de Ensamblaje y Prueba de Intel a Vietnam dejan al país sin dos referentes que sostenían el discurso gubernamental sobre la solidez del sector en el territorio nacional.
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La narrativa oficial deberá ajustarse: además de la pérdida de las firmas, la meta de atraer fondos de la Chips and Science Act (Ley de Chips) pierde fuerza ante el anuncio del presidente de Estados Unidos (EE. UU.) de eliminar el incentivo de $500 millones destinados a impulsar iniciativas en la región.
El voto de confianza de EE. UU. hacia Costa Rica como destino confiable para la industria de microprocesadores, junto con los fondos prometidos por la Ley de Chips, impulsaron la creación de la Hoja de Ruta para el Fortalecimiento del ecosistema de Semiconductores en Costa Rica, que busca posicionar al país en este sector estratégico.
La apuesta por desarrollar un mega clúster de semiconductores —anunciado por el ministro del Comercio Exterior (Comex) Manuel Tovar años atrás—, se desarrolla en medio de la inestabilidad en el comercio internacional: la creciente rivalidad entre Washington y Pekín, ambos en carrera por dominar la industria global de chips. Este escenario polariza la ubicación de compañías a nivel mundial.
Durante una conferencia, el presidente Rodrigo Chaves se preguntó qué habría pasado con la decisión de Intel si el país ya contara con jornadas 4x3, un mercado eléctrico más abierto, un Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) más eficiente, formación dual y mayor bilingüismo. A pesar de la crítica hecha por el mandatario, varias de esas condiciones ya se abordan en el Centro de Excelencia que desarrolla el INA para capacitar talento en tecnología y semiconductores.
Además de perder dos anclas del ecosistema, Costa Rica encara otro obstáculo: la aplicación de un arancel del 15% por parte de EE. UU.

Salidas empresariales
La finalización de la operación de Qorvo en Costa Rica se dio de manera paulatina desde inicios de año, de acuerdo con Laura López, gerente de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer).
Esa compañía de origen estadounidense, especializada en semiconductores y soluciones de radiofrecuencia, llegó a territorio costarricense hace 29 años. Sin embargo, ahora trasladará sus operaciones a Asia.
“Procomer ha ayudado en el proceso de outplacement (recolocación) de los colaboradores de Qorvo. En el momento que la compañía tomó la decisión (de irse) lo conversamos y nos comentaron la importancia que tiene para ellos estar cerca de sus proveedores y de sus clientes, cuya mayoría está en China”, explicó López.
De hecho, el 20,15% de las exportaciones de semiconductores y dispositivos vinculados tuvieron como destino China en el 2023 tomando en cuenta los servicios ligados a la industria. La cantidad enviada en 2024 representó un 15,25% de todas las exportaciones del sector.
La retirada de la compañía significa un duro golpe al discurso que las autoridades brindaban cuando se referían al ecosistema de semiconductores en el país. Los casi 30 años de presencia de una de las principales firmas mundiales del sector daban respaldo a la estabilidad que imperaba para las empresas en el país.
El remezón entre la industria se intensificó con el anuncio del traslado del Centro de Ensamblaje y Prueba de Intel, también a Asia. La firma continuará con su negocio de servicios globales en el país, pero esta nueva baja —que ya se había dado en 2014 y se reinstaló en 2022— afectaría a cerca de 800 empleados directos, según verificó EF con los datos del Sistema Centralizado de Recaudación (Sicere) de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) con corte a 2024.
Manuel Tovar, ministro de Comercio Exterior (Comex), indicó en conferencia de prensa que Intel ha reafirmado su confianza en el país con las otras operaciones que tiene de ingeniería y servicios globales que equivalen a más de 2.000 empleos.
El jerarca de Comex también señaló que, en medio de la turbulencia, la empresa Applied Materials —productora de equipamiento de semiconductores— anunció el inicio de operaciones semanas atrás. No obstante, esta es una inversión que se había confirmado desde 2024 y que oficialmente abrió las puertas de operación recientemente. Es decir, no se tomó la decisión de invertir en el país en medio de las salidas de grandes competidores.
Mientras las autoridades deberán reescribir sus discursos a la hora de ejemplificar casos de éxito, también se ralentiza el alcance de la meta de Comex de replicar el crecimiento que posee la industria de ciencias de la vida. Tovar indicó a este medio en 2023 que el país quiere convertir el ecosistema de microprocesadores en un “mega clúster de semiconductores como el que tenemos con dispositivos médicos”.
Movimiento económico
La partida arancelaria de dispositivos de semiconductores mostró una baja de $9,2 millones en las exportaciones de 2024 frente a los resultados de 2023, según el portal estadístico de la Promotora.
Pero mientras se dio ese descenso en dicha partida, los circuitos integrados y microestructuras electrónicas empezaron a tener un mejor rendimiento en el flujo de exportaciones al pasar de $508.000 en 2023 a $1,5 millones en 2024.
Mientras un resultado va en dirección opuesta a la meta del Gobierno de replicar el éxito del sector de equipo de precisión y médico, el otro muestra mejores condiciones. No obstante, los microprocesadores están lejos de acercarse a los números que generan los dispositivos médicos: en la balanza comercial de cada año va en aumento y en el 2024 registró un incremento de 14%.
Asimismo, la ausencia parcial de Intel (que se va como parte de su reducción de costos a nivel global) y la salida total de Qorvo provocarán que el Régimen Especial (RE) sufra una desaceleración en su crecimiento económico. Róger Madrigal, presidente del Banco Central (BCCR), indicó que las salidas de las dos firmas de semiconductores provocará una baja en las exportaciones de manufactura.
Tras esa situación, el BCCR proyecta que el Producto Interno Bruto (PIB) del RE —donde se ubican estas empresas— baje a 3,2% para 2026, frente al 7,8% que se espera para el presente año. Así se dio a conocer durante la presentación del Informe de Política Monetaria (IPM) para julio del año en curso.
“Si no fuesen (estas dos empresas) el crecimiento de la economía costarricense sería mayor”, dijo Madrigal.
Una apuesta difícil
El Gobierno apostó por un sector en el que ya tiene experiencia con la atracción de grandes nombres, pero ahora se enfrenta a la retención de esos protagonistas y a atraer nuevos participantes que puedan ocupar el espacio que dejan las recientes salidas.
Acercarse al 44% de participación de las exportaciones que representa el sector de equipo de precisión médico en los próximos dos años suena difícil tomando en cuenta las proyecciones dadas por el BCCR.
“Existe la necesidad de replantearse. ¿Vamos a tener más oportunidades de traer más procesos de ensayo y prueba? Está por verse y es lo que hay que analizar. Pero al mismo tiempo también hay que entender que en estas industrias las empresas globales ven el mundo hoy en una transición y los temas de la reestructuración de las empresas lo tienen flor de piel”, consideró Vanessa Gibson, directora de Clima de Inversión de la Coalición Costarricense de Iniciativas de Desarrollo (Cinde).
Teradyne, Rydev, Altanova, Samtec, East West, Smiths Group, Zollner, Briskneat, Grupo Capris, Siemens, HPE, e Intel (parcialmente) son las empresas que aún sobreviven en el ecosistema que el país quiere ampliar.

¿Marcha atrás en la apuesta?
Según la Asociación de Empresas de Zonas Francas (Azofras), la salida parcial de Intel y la reubicación completa de Qorvo no deben verse como eventos puntuales, sino como síntomas del entorno competitivo que enfrenta Costa Rica. La afirmación, incluida en un comunicado de prensa, va en la misma línea de lo cuestionado por Rodrigo Chaves en su más reciente aparición pública.
Pero no todo el peso cae sobre el desarrollo del país. La tensión geopolítica entre EE. UU. y China marca la agenda de inversión de las compañías que buscan ubicaciones estratégicas cerca de sus proveedores y clientes y que sean objetivos de la menor implicación de consecuencias de la tensión entre las potencias tecnológicas.
La Hoja de Ruta y las universidades privadas, que han fortalecido su oferta académica para formar nuevo talento especializado en semiconductores, son las herramientas que utiliza el país para demostrar que trabaja en brindar condiciones para los inversores.
Además, el Centro de Excelencia continúa activo con su programa de Operaciones de Ensamblaje y Pruebas de Semiconductores. En total, sus cursos tecnológicos capacitaron a 16.086 personas y se proyecta que en 2025 esa cifra supere los 27.000 cupos disponibles.
López indicó que desde la entidad que representa se han mantenido promocionando el país en espacios como Semicon West, uno de los eventos más relevantes en semiconductores.
“Seguimos posicionándonos en los espacios correctos con la propuesta de valor correcta, donde el talento humano es uno de nuestros principales factores, pero también lo es la estabilidad, la cercanía no solo geográfica con Estados Unidos, sino también la cercanía a nivel comercial que históricamente hemos tenido”, señaló López.
Pese al respaldo expresado por las autoridades estadounidenses, la decisión de eliminar los fondos de la Ley de Chips evidencia que ese voto de confianza tiene límites. No es un reflejo del atractivo de Costa Rica, sino del cambio de rumbo en la política industrial de Washington.
A nivel local se mantiene pendiente la edificación del Centro de Excelencia, un espacio para potenciar el talento para esta industria, el cual cuenta con tres años más para iniciar con la construcción que se plantea hacer en Barrio Don Bosco. Además, el país concretó la colaboración de Purdue University —una de las universidades estadounidenses más destacadas en ingeniería— para contar con la malla curricular de la institución en universidades del país.
Tanto Tovar como López sostienen que Costa Rica seguirá impulsando el crecimiento de esta industria. A pesar de lo que expresan las autoridades, será decisión de las demás empresas del ecosistema de chips determinar si el país cuenta con el talento humano necesario y si la estrategia nacional responde a las expectativas de sus casas matrices, en medio de un entorno global convulso para el sector tecnológico.