La infraestructura portuaria y vial continúa siendo el principal dolor de cabeza para exportadores e importadores de Costa Rica, quienes además han debido lidiar este año con un tipo de cambio a la baja y con una dinámica de comercio internacional que cambia al ritmo de las presiones globales.
Ante este panorama, la Cámara de Exportadores (Cadexco) trazó un camino de recomendaciones para que la modernización portuaria, las intervenciones en aeropuertos y vías no frenen el desarrollo del sector.
Una de las propuestas apunta a prohibir el atraque de cruceros en Puerto Caldera, con el fin de que el espacio que hoy ocupan sea destinado exclusivamente a buques de carga. La idea responde a una urgencia evidente: la capacidad del puerto opera prácticamente al 100%, generando tiempos de tránsito cada vez más prolongados y afectando la previsibilidad logística.
Jorge Vega, vicepresidente de Cadexco, advirtió que la modernización de la infraestructura obsoleta de Caldera podría completarse hasta el 2030, por lo que los largos tiempos de espera son un problema que no puede prolongarse.

Puerto Caldera
Mientras las labores de modernización en Puerto Caldera se coordinan y el Instituto Costarricense de Puertos del Pacífico (Incop) avanza con el proceso de licitación, Cadexco plantea que las autoridades redireccionen los flujos de carga y cruceros hacia Golfito y Puntarenas con el fin de “desahogar Caldera mientras se moderniza”.
Vega explicó que los cruceros se quedan todo el día en el puerto y, aunque dan servicios y pagan por el espacio, “no están moviendo carga y no están utilizando el puerto para lo que es: un puerto de carga. Y en este momento tenemos los espacios limitados”.
Acelerar y asegurar el proceso de adjudicación de la licitación, así como revisar el plan de transición al nuevo adjudicado son las propuestas que completan la línea que trazó Cadexco de recomendaciones con el puerto que se ubica en el Pacífico costarricense.
APM Terminals, Limón
En el Caribe, la conversación toma un rumbo distinto. Desde 2019, APM Terminals administra la terminal de Moín bajo un proceso de modernización continua que, de momento, suma dos de las cuatro fases contempladas. Las etapas restantes —2B y 3— solo iniciarán cuando el puerto movilice 1,5 millones y 2,5 millones de TEUS (unidad de medida en transporte marítimo), respectivamente; sin embargo, el volumen actual apenas ronda los 1,3 millones.
Debido a esa situación, según Vega, actualmente los usuarios del puerto pagan dentro de la tarifa un rubro correspondiente a la etapa 3, la cual sí va a existir “pero no vamos a usar porque se está sobrediseñando el puerto” porque no responde a la realidad de TEUS que pasan por ahí.
La recomendación de la cámara es retomar estudios y análisis financieros del proyecto.

Japdeva
La operación de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica de Costa Rica (Japdeva) también forma parte del análisis y propuestas que trazan los exportadores.
Cadexco se opone al ajuste tarifario que implicaría aumentos entre 43% y 133%, dependiendo del tipo de carga. El aumento fue propuesto por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) debido a un rezago tarifario de 10 años en el sistema bananero, fruta fresca, hierro y el sistema portacontenedor.
Ante esta situación, las recomendaciones de la Cámara son:
- Desestimación integral de la propuesta tarifaria por vicios sustantivos.
- Desarrollo de planes de adaptación portuaria para carga a granel y carga general.
- Evaluación integral de impacto socioeconómico en Limón.
- Implementación obligatoria de sistemas de costeo para las empresas estibadoras subcontratadas.
- Estudio integral de servicios brindados por empresas estibadoras y los servicios no regulados.
Aeropuertos
El frente aeroportuario tampoco escapa a las alertas. La pista del Aeropuerto Daniel Oduber, en Guanacaste, presenta deterioros que no se han atendido por presuntas irregularidades en la declaratoria de emergencia. Esto provoca que la sede aérea en Guanacaste no cumpla las condiciones para trasladar carga.
“Se tiene que hacer un estudio puntual para ver si los concretos de esas pistas funcionan para resistir el transporte de carga. Sabemos que no dan los anchos y que no están de acuerdo a la ley para recibir aviones de carga”, puntualizó Vega.
Además de retomar los estudios técnicos, las recomendaciones son aprovechar la pista en la noche para el transporte de carga y durante el día enfocarse en pasajeros.
En paralelo, la dependencia del Aeropuerto Juan Santamaría se mantiene alta: un 33% de las exportaciones del país salen por esa terminal. Aun así, el aeropuerto opera con una única vía de ingreso, lo que para Cadexco requiere una intervención urgente. Entre las propuestas figuran habilitar una nueva entrada, ampliar el Centro de Tránsito Rápido de Mercancías y abrir una oficina de Aduanas en Cartago para aliviar la presión sobre Alajuela.
Infraestructura vial
La red vial constituye el último eslabón de una cadena compleja. Los cierres repentinos en la Ruta 32 por deslizamientos generaron 30 días de interrupción entre enero y noviembre de este año, un golpe directo para la logística hacia Limón.
Lo anterior provocó las siguientes recomendaciones de Cadexco:
- Priorizar la finalización completa y oportuna de las obras en la Ruta 32.
- Asignar recursos específicos provenientes del canon portuario y del aporte de la concesionaria APM Terminals al proyecto del puerto de Limón.
- Revisión de la viabilidad jurídica para una intervención única e integral en el tramo Zurquí (provoca el 80% de los cierres).
- Implementar un programa de mantenimiento preventivo de la Ruta en pro de la protección de las vidas humanas.
En cuanto al tren de carga, el sector apuesta por un modelo híbrido que cumpla con los estándares del comercio internacional, garantice competitividad y ofrezca un costo similar al transporte terrestre. La meta es clara: una logística moderna, integrada y funcional que acompañe el crecimiento exportador y no lo limite.
El diagnóstico de Cadexco converge en una misma conclusión: sin infraestructura moderna y funcional, el país corre el riesgo de perder terreno en un mercado internacional cada vez más exigente.
