Ocho exportaciones ticas son número uno en sus mercados de destino

Los productos costarricenses conquistan a países de América y Europa, convirtiéndose en el proveedor número uno de determinados bienes en al menos 11 naciones. Costa Rica logró ese puesto en el 2022 gracias a la producción del sector agrícola, alimentario, eléctrico y metalmecánico.

De acuerdo con la Promotora de Comercio Exterior (Procomer) los productos costarricenses que lideran en sus mercados receptores son: salsas y preparaciones, yuca, cables eléctricos, barras de hierro o acero, banano y piña.

“(La lista) incluye aquellos productos que más dinamizaron en el 2023 y que Costa Rica tiene alta participación en los principales mercados de destino”, aclaró la Promotora.

Al actualizar dicha lista de 2022 a mayo 2023 se añaden subproductos de la piña como la versión deshidratada y en jugo concentrado; también la yuca enlatada y congelada.

A nivel mundial, Costa Rica es el principal exportador de jugo de piña y piña fresca; en la Unión Europea (UE) la yuca costarricense, con sus variaciones, domina ese nicho del mercado.

Las condiciones de la producción, la calidad y el cuidado al medio ambiente son algunos de los factores que inciden en la preferencia de los compradores.

Número uno, ¿dónde?

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Según datos de Procomer, el liderazgo de los envíos costarricenses a los distintos mercados se refleja a través del porcentaje de participación del total de importaciones mundiales que realiza cada país. También entran en la ecuación los montos que representan.

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Así es la participación de mercado de los bienes costarricenses en cada uno de los territorios donde el país aparece como el principal proveedor:

• 27% de participación en las importaciones de banano que realiza Alemania.
• 70% de las importaciones de piña por parte de Bélgica.
• 76% de las importaciones de yuca desde España y 38% en el caso del banano.
• 85% de participación en importaciones de piña que ejecuta Estados Unidos (EE.UU.) y 91% en el caso de la yuca.
• 78% del mercado de yuca que importa Francia.
• 44% de las importaciones de salsas y preparaciones en Guatemala.
• 47% en cables eléctricos del mercado en Honduras y 31% en salsas y preparaciones.
• 56% de las importaciones que hace Israel de piña deshidratada.
• 63% en barras de hierro o acero que ingresan a Nicaragua y 39% de las salsas y preparaciones.
• 74% de participación en importaciones de piña que realiza Países Bajos.
• 82% de participación en barras de hierro o acero que ingresan a República Dominicana y 25% en cables eléctricos.
• A esta lista se añade el jugo de piña, con el que Costa Rica es el principal proveedor mundial.

Las frutas y tubérculos tienen la ventaja de que son versátiles en cuanto a su preparación, por lo tanto se le saca provecho de principio a fin para ofrecer la versión fresca o subproductos. Ese es el caso de la piña fresca que goza de prestigio a nivel mundial, lo cual da ventaja para que las opciones deshidratadas y en jugo entren a competir con buena reputación.

“Los productores que pueden aprovechar la piña que no se exporta, lo hacen (crean subproductos). En caso de que no puedan, se le entrega directamente a las plantas procesadoras que hay en el país”, indicó Abel Chaves, presidente de la Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Piña (Canapep).

En el momento que la fruta, verdura o tubérculo es procesado deja de pertenecer al sector agrícola y se pasa a formar parte de la industria alimentaria. De acuerdo con Chaves, el método de procesar alimentos requiere de tecnología de la que no todos los productores disponen, por esta razón venden parte de sus cosechas a terceros.

La materia prima que se compra para procesar debe ser de buena calidad, es decir, cumplir con los mismos estándares que mantienen las exportaciones frescas. El material que se vende es el que tiene golpes, tamaño y forma desigual o coloración imperfecta.

“Canapep es la única entidad (piñera) que está acreditada como organismo de inspección. Esto nos da garantía de todo el trabajo que se hace a nivel técnico y de campo”.

—  Abel Chaves, presidente de Canapep.

Los subproductos entran a competir a partir de cosechas que no tienen la mejor imagen para conquistar a los compradores, pero sí el mejor sabor y reputación. Un ejemplo de esto es la piña deshidratada, que tiene el liderazgo del sector en Israel.

Prestigio costarricense

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Los tratados internacionales de los que forma parte el país, las certificaciones de buenas prácticas ambientales en los procesos de desarrollo y la calidad de la mercancía pesan cuando se habla de exportaciones costarricenses.

“Los agricultores de banano son objeto de auditorías de manera periódica para verificar que apliquen las prácticas de gestión medioambiental establecidas, en especial en lo que respecta al manejo de desechos y el uso de plaguicidas”, enfatizó Siany Villalobos, presidente de la Cámara de Exportadores de Costa Rica (Cadexco).

El banano que se exporta a la UE cuenta con la indicación geográfica “Banano de Costa Rica”, la cual permite que los consumidores puedan conocer el compromiso ambiental, el origen y la calidad.

La UE también aplica el Pacto Verde, que introduce parámetros ambientales a las normas comerciales. Un ejemplo es la necesidad de certificar ciertos bienes destinados al mercado europeo, como el cacao o la madera, para asegurar que su producción no se tradujo en deforestación.

“Es mucho más complicado el mercado europeo porque es más exigente. Cada vez quiere más productos con menos agroquímicos. La tendencia va dirigida, en el futuro, a reducir los químicos en la agricultura, la conservación del medio ambiente, la sostenibilidad y una agricultura más saludable para el consumo humano”, destacó Diane Quesada, gerente de Trobanex, empresa que exporta puré de banano y hojuelas de banano hacia Alemania.

En Alemania el valor de los envíos de banano representaron $257 millones y hacia España un total de $100 millones. Ambos montos fueron registrados en el 2022.

El principal competidor bananero de Costa Rica es Ecuador, país que lidera las exportaciones a nivel mundial. No obstante, el fruto costarricense va ganando terreno en países europeos como Alemania y España debido a un aspecto adicional a la calidad: cercanía geográfica.

La yuca presenta un panorama similar en la UE, con la diferencia de que en dicha región el tubérculo tico es el más solicitado por los importadores, ya sea de manera fresca o procesada. Esto según los datos brindados por Procomer.

En España y Francia el segmento de yuca está dominado por el de origen tico, cuyo envío en el 2022 representó $8 millones en cada país. En nuestro continente, Costa Rica es el proveedor número uno de EE.UU. con una venta de $99 millones en 2022.

Productos Agropecuarios Visa exporta yuca fresca a EE.UU. y a la UE, con clientes en Países Bajos, Portugal, Italia y por supuesto España y Francia. Para Adriana Mejías, ejecutiva de mercadeo de la compañía, el mercado europeo es más complicado que el estadounidense porque implica “limitación de uso de parafina y requerimiento de registros adicionales”.

El peso de la calidad se da desde el inicio de la producción, siendo el agricultor el primer responsable de cumplir con los estándares ambientales. En los industriales recae una cuota de peso al tener que manipular las cosechas de la manera más inocua posible.

El proceso de producción en planta requiere de medidas ambientalmente sostenibles en temas de manejo de desechos, por ejemplo. La etapa de encadenamiento es clave para crear oferta exportable de calidad, sin diferencia entre envíos de materia prima o procesada.

En TicoFrut S.A. la piña que obtienen para crear jugos concentrados es el resultado del 20% de la cosecha que realizan los productores con los que tienen acuerdos de cooperación. Esa cantidad responde a la fruta que creció con la corona torcida, la quemó el sol o tiene una forma que no es la adecuada.

“Hace muchos años las cosechas con esas características se botaba y se convertía en un problema casi ambiental por su manejo. Ahora esa fruta tiene un precio y es aprovechada”, aseguró Roberto Aragón, presidente y director general de TicoFrut S.A.

La piña nacional es la favorita de los mercados de EE.UU., Países Bajos y Bélgica. Los envíos reportados en el 2022 fueron por montos de $754 millones, $106 millones y $99 millones, respectivamente.

Países Bajos es el punto de partida para llegar a más países europeos. Desde el puerto de Rotterdam las mercancías pueden enviarse a Francia, España y Portugal, por ejemplo.

En Centroamérica las salsas y preparaciones de Costa Rica son las principales en el mercado guatemalteco ($61 millones), nicaragüense ($21 millones) y hondureño ($19 millones). El subproducto se crea, en mayor medida, con tomates y variedades de chiles; las preparaciones hacen referencia a las salsas que se ofrecen listas para acompañar pastas o marinar carnes.

Alimentos Kamuk es una fábrica especializada en salsa para marcas privadas. En la región centroamericana comercializan salsas picantes para Guatemala.

Tener protagonismo en Guatemala podría sonar contradictorio ya que ese país goza de una industria desarrollada. Según Rodrigo Román, gerente comercial de Alimentos Kamuk, Costa Rica se convirtió en un aliado estratégico en las categorías donde el país importador no es competitivo.

En la fábrica también crean salsas picantes, barbacoas y salsas para marinar que tiene por destino Europa y EE.UU.

Por otra parte, la industria eléctrica y la de barras de hierro o acero se desmarcan del sector agrícola y ponen un punto y parte en la lista de los productos en los que Costa Rica es el principal proveedor.

República Dominicana y Nicaragua se decantan por las barras de acero de origen tico. Esos territorios hicieron compras por $76 millones y $42 millones, respectivamente, de acuerdo con datos de Procomer.

La empresa de aceros ArcelorMittal Costa Rica es el líder de exportaciones hacia esos dos destinos. “Históricamente ArcelorMittal Costa Rica se ha concentrado en exportar sus productos a Centroamérica. Con el pasar de los años ha ido creciendo y atendiendo nuevas oportunidades”, informó la compañía que especificó que el 45% de sus exportaciones tiene como destino el país vecino y el territorio caribeño.

Cercanía con público latino

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Para algunas personas podría parecer extraño que el público estadounidense y europeo demande productos como la yuca en sus distintas versiones. Este comportamiento se debe, en parte, a la nostalgia de los latinos por consumir o hacer platillos de sus países de origen.

Alberto Bonilla, presidente de la Cámara de Exportadores de Raíces y Tubérculos, indicó el año anterior a EF que la preferencia se da “por una cuestión étnica, donde los africanos y latinos que habitan en dichos territorios apelan a la costumbre alimenticia que tenían en sus países natales”.

Apelar al recuerdo por medio de sabores y olores es un método que mueve el sentir de los consumidores que se encuentran a miles de kilómetros de distancia del país que los vio nacer. En ocasiones esta estrategia es forzada al lanzar al mercado productos que fueron éxitos en cierta época, pero en el caso del sector agrícola no es necesario.

Los sabores y olores siguen siendo los mismos desde su cosecha. Del público depende escoger entre la versión fresca o procesada, aunque en los mercados con los que se tiene mayor distancia se facilita el envío de subproductos porque tienen mayor tiempo de vida útil.