
Washington y otras procedencias. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, considera financiar el muro antiinmigración en la frontera con México con una tasa de 20% a los productos importados de ese país, dijo este jueves 26 de enero su portavoz, Sean Spicer.
La noticia surge en momentos en que las relaciones diplomáticas entre ambos países están en un punto crítico luego de que el mandatario mexicano, Enrique Peña Nieta, cancelará una visita a Trump programada para el 31 de enero próximo.
"Haciendo eso (nuevo impuesto), prevemos recaudar unos $10.000 millones por año y gracias a ese mecanismo el muro se pagará fácilmente", dijo Spicer a periodistas.
El portavoz no dio más detalles sobre la forma de aplicación de ese impuesto ni desde cuando comenzaría a regir. Indicó que podría estar incluido en una reforma fiscal más amplia.
El vocero dijo que ese gravamen es una forma de "respetar" a los contribuyentes estadounidenses y afirmó que el tema ya ha sido considerado con miembros de ambas cámaras del Congreso.
El encuentro entre Trump y Peña Nieto tenía como objetivo revisar las relaciones bilaterales, marcadas tanto por el tema de la migración como por los asuntos económicos y comerciales.
Pero ese encuentro fue cancelado por Peña Nieto después de que el presidente estadounidense le espetó en su cuenta Twitter: "Si México no quiere pagar el muro que necesitamos tanto, mejor que cancele su próxima visita".
Poco después, Trump sostuvo que tal reunión en estos momentos habría sido estéril.
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A raíz de la suspensión de la visita, la Bolsa Mexicana de Valores cerró este jueves con una pérdida de 1,38%. Entre tanto, la moneda mexicana se depreció un 0,2% y terminó en 21,60 pesos por dólar contra los 21,55 del miércoles, a raíz de la incertidumbre sobre el futuro de las relaciones bilaterales.
En los últimos meses, el peso mexicano ha tenido un comportamiento volátil afectado principalmente por las amenazas proteccionistas y antiinmigrantes de Trump.
El 8 de noviembre de 2016, día en que ganó las elecciones, el peso mexicano superó la barrera de los 21 pesos por dólar por primera vez, mientras que hace dos semanas cayó a un mínimo histórico de 22,25 pesos por dólar.
Trump ya amenazó con salirse del Tratado de Libre Comercio para América del Norte que su país sostiene con México y Canadá, si no logra mejores condiciones para su país.
Alrededor del 80% de las exportaciones mexicanas son enviadas a Estados Unidos. Según Trump, EE. UU. tiene un déficit comercial con México del orden de $60.000 millones anuales.
"Ha sido un acuerdo de un solo lado desde el inicio del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, con enorme número de empleos y empresas perdidas", apuntó Trump.
Muro y más vigilancia
Por su parte, el mandatario estadounidense firmó el miércoles un decreto en el que autorizó la construcción de un muro a lo largo de los 3.200 km de la frontera entre ambos países, una medida que el mandatario mexicano lamentó y reprobó.
Hoy, Trump indicó que la obra podría ser financiada con una tasa del 20% a los productos importador desde México.
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Manuel Herrera, presidente de la Confederación Cámaras Industriales de México, consideró que un impuesto a las importaciones es una "noticia muy grave, verdaderamente preocupante y aberrante, no nada más para México sino para las empresas estadounidenses y un mensaje muy negativo para el mundo".
"No estaríamos pagando los mexicanos pagan los estadounidenses", dijo Herrera en declaraciones a Radio Fórmula.
Peña Nieto, cuya popularidad se encuentra en niveles históricamente bajos para un presidente mexicano, recibió mensajes de respaldo de políticos de oposición, así como de empresarios locales tras la cancelación del encuentro.
"Estoy totalmente de acuerdo. Me parece que era la decisión acertada", dijo el excanciller Jorge Castañeda en una entrevista con la radio Grupo Fórmula.
Por su parte, la construcción del muro, uno de las principales promesas electorales de Trump, podría alcanzar hasta los $50.000 millones, según diversas fuentes.
En un mensaje a la nación, Peña Nieto había reiterado el miércoles que su país no pagará por el muro.
"Lamento y repruebo la decisión de Estados Unidos de continuar la construcción de un muro que desde años lejos de unirnos, nos divide (...). Lo he dicho una y otra vez: México no pagará ningún muro", expresó el mandatario.
Trump también firmó otro decreto para aumentar la cantidad de guardias y mecanismos de vigilancia fronteriza y para agilizar la deportación de los inmigrantes indocumentados, que se calculan en unos 11 millones de personas.
Los decretos del mandatario prevén el congelamiento de fondos a ciudades y distritos que se nieguen a arrestar inmigrantes indocumentados y determinan fondos para construir más centros de detención en la zona de frontera.
Los alcaldes de Los Ángeles y Nueva York, las dos mayores ciudades "santuario" en Estados Unidos, condenaron públicamente estos decretos.
"Protegeremos a toda nuestra gente sin importar de dónde vienen y sin importar su estatus migratorio", dijo el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.
Eric Garcetti, alcalde de Los Ángeles, sostuvo que su ciudad seguirá siendo tolerante y dará la bienvenida a todas las personas "sin importar lo que suceda en Washington DC".
Los alcaldes de otras cuatro ciudades californianas (San Francisco, Oakland, San José y Berkeley) también denunciaron el decreto de Trump en un comunicado conjunto.
Y el alcalde de Chicago, Rahm Emanuel, fue enfático: "Aunque tú seas de Polonia, Pakistán, India, Irlanda, Israel, México o Moldavia, bienvenido seas a Chicago".