El Banco Central de Costa Rica (BCCR) considera que el bajo nivel de la inflación no es sinónimo de alerta, sino que es un efecto que se traduce en una estabilidad macroeconómica, eficiencia y equidad.
La variación interanual de la inflación, medida por el Índice de Precios al Consumidor (IPC), cerró mayo pasado en 0,97%. Este sería el resultado más bajo, desde que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos realiza la medición (1976).
Sin embargo, desde años anteriores el Central ejecutaba el cálculo, y según sus registros, el país había percibido un nivel similar entre los años 50 y 60, explicó Roger Madrigal, director de la División Económica del BCCR.
El nivel actual de la inflación llegó en gran parte tras una baja en los precios del petróleo en los mercados internacionales, aunque la estabilidad en el tipo de cambio también ha ayudado a su tendencia en picada durante este 2015.
Dentro de los aspectos positivos que valora el Banco sobre el nivel actual de la inflación, está el ajuste de las expectativas.
La encuesta mensual de expectativas de inflación proyecta una variación en los precios de 4,7%, en promedio para los próximos 12 meses, lo que evidencia credibilidad en el Central.
Además, tiene efectos de eficiencia porque permite analizar el cálculo económico, y así la gente tiene más confianza para sus decisiones de ahorro, consumo, inversión, entre otros. Lo mismo ocurre con la fijación de precios y salarios, que a su vez tiene que ver con la estabilidad macroeconómica.
Según Madrigal, la inflación es una especie de impuesto que carga proporcionalmente más a los asalariados y a las pensiones. Por ello, desde el punto de vista de la equidad, la erosión en el poder de compra es menor.
Los niveles actuales permiten que el sector privado perciba un entorno de menor incertidumbre para hacer su cálculo económico, y protege los ingresos como el poder adquisitivo de las familias, explicó Eduardo Prado, gerente del BCCR.
En tanto, desde hace varios meses, el Banco Central visualizaba que la inflación se ubicaría por debajo del rango meta, ubicado entre 3% y 5%. Incluso, afirmó que este resultado se mantendría temporalmente.
En el último comentario sobre la economía nacional, la autoridad monetaria afirma que "se espera que esta condición permanezca en algunos meses de 2015 e incluso, si el precio internacional de hidrocarburos aumentara de manera similar a lo incorporado en los contratos a futuro negociados hasta la fecha de este informe, no comprometería la consecución del objetivo inflacionario".
Lo que analiza el Central es un panorama en donde los precios internacionales del petróleo ya están repuntando. Precisamente, este martes se presentaron cotizaciones de $65 por barril. En los próximos meses vendrán aumentos en los precios de los combustibles que van a revertir el IPC y llevarlo dentro del rango meta.
Aún así, si Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) se atrasa en la aprobación del ajusto podría afectar lo proyectado, por lo que es preferible no detaller cuándo ocurriría ese ajuste dentro del 3% y el 5%, explicó Madrigal.