Contra su voluntad, el Instituto Nacional de Seguros (INS) ya procedió a revertir un ajuste contable por ₡21.479 millones en el seguro obligatorio de Riesgos del Trabajo (RT), tal como le fue ordenado por la Superintendencia General de Seguros (Sugese).
Así consta en los recientes estados financieros intermedios de la aseguradora a septiembre de 2025, así como en sus estados financieros auditados, separados y consolidados, al 31 de diciembre de 2024. Esto es así porque la medida afecta las cifras de la entidad de ambos años.
El INS había realizado dicho ajuste porque su Junta Directiva acordó derogar una serie de beneficios que antes se otorgaban a los clientes de las pólizas de RT. Al eliminarlos, se liberó una provisión registrada contablemente para el 2024 por ₡21.479 millones, que se trataba de una reserva para atender aquellos beneficios.
Originalmente la aseguradora registró el ajuste en los estados financieros auditados de 2024, pero la Sugese determinó que la decisión fue aprobada por la Junta Directiva en enero del 2025.
Por tal motivo, la Superintendencia le solicitó a la aseguradora una medida correctiva que implicaba revertir el ajuste contable en las ganancias del ramo para 2024 y registrarlo en el ejercicio 2025.
Al aplicarse esta resolución, los estados financieros del INS ya no reflejan utilidades por ₡90.143 millones en 2024, como se reportó inicialmente, sino por ₡68.664 millones. Al mismo tiempo, esos ₡21.479 millones se trasladan a las ganancias de este 2025.
En efecto, el nuevo monto ya aparece en la línea de “utilidad neta antes de impuestos y participaciones” correspondiente a los estados financieros separados del INS a diciembre de 2024.
Además, los estados financieros auditados al 31 de diciembre de 2024 ahora incluyen una nota en la cual se explica cómo se realizaron los ajustes en las provisiones técnicas y se aclara que tales ajustes “no se pueden considerar como sustento o prueba de aceptación de responsabilidad o posición por parte del Instituto”.
“El INS continuará buscando que se declare inválido el acto, debido a que consideramos que el Instituto Nacional de Seguros tiene razones sólidas que respaldan su posición”, dijo la gerencia de esa entidad a El Financiero, por medio de su oficina de prensa.
Los antecedentes
La primera vez que la Sugese le solicitó al INS la corrección del ajuste contable fue el pasado 21 de mayo. Sin embargo, el INS presentó una medida cautelar en el Tribunal Contencioso Administrativo, que fue inicialmente rechazada el 13 de junio anterior.
Posteriormente la aseguradora planteó un recurso de apelación que también fue rechazado, el 30 de septiembre, por el Tribunal de Apelaciones.
Esto ratificó la resolución 2025005821 de primera instancia, obligando al Instituto a acatar lo dispuesto por la Sugese: revertir el asiento contable por ¢21.479 millones y registrarlo en el periodo 2025, a más tardar el 17 de octubre.
“La información financiera de las aseguradoras debe reflejar fielmente la realidad económica de los hechos, con el fin de darle transparencia al mercado y cumplir con la normativa vigente. Esta resolución refleja la aplicación rigurosa de los principios de supervisión que guían nuestro trabajo”, dijo en aquel momento el superintendente general de seguros, Tomás Soley Pérez.
La aseguradora realizó el cambio el 15 de octubre, según consta en la actualización de los estados financieros firmada en esa fecha por el gerente general del INS, Luis Fernando Monge Salas.
“El INS procedió a cumplir con la instrucción de la Sugese y realizó el ajuste contable en el plazo concedido. De esta forma, la aseguradora reafirma su compromiso con la transparencia y el cumplimiento de la normativa vigente”, dijo la entidad en respuesta a consultas de este medio.
No obstante, en una anterior entrevista con este medio, Monge sostuvo que la reversión solicitada es improcedente, dado que el excedente de ¢21.479 millones no se originó en este año.
Por tal motivo, este 3 de noviembre, la aseguradora anticipó que continuará con el proceso judicial.
Hasta el 6 de noviembre del 2024, el INS era la única entidad que ofrecía el seguro obligatorio de Riesgos del Trabajo. No obstante, en esa fecha, la Sugese autorizó el registro de la empresa Oceánica (MNK Seguros) para ofrecer ese tipo de cobertura.
La entrada en operación de otra entidad aseguradora significó un cambio en las condiciones de mercado, por lo que el INS decidió valorar distintas medidas para enfrentar la competencia.
Entre ellas, la Junta Directiva acordó derogar aquellos beneficios que el INS otorgaba como parte del seguro de RT, que eran adicionales a los establecidos en el Código de Trabajo.
