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La llegada del Nuevo Año nos hace reflexionar, y nos lleva a enfrentar nuevos desafíos y proponernos nuevas metas.
Como empresarios, invertimos una inmensa cantidad de tiempo y energía para desarrollar nuestros negocios, a la vez que brindamos servicio a nuestros clientes y a los consumidores en general, siempre pendientes de también desarrollar un ambiente acogedor para nuestro equipo de trabajo.
Así, los empresarios frecuentemente nos preocupamos mayormente por la gerencia y el desarrollo de nuestros negocios y somos negligentes en preocuparnos de nosotros mismos.
Por tal razón, para el 2017, he resuelto en dedicar parte de mis energías al cuidado de mi salud física y mental.
Igualmente, estoy retando a mi equipo de trabajo a ver el Nuevo Año como una oportunidad para el crecimiento personal y profesional. De acuerdo a lo anterior, he adoptado las siguientes resoluciones:
Aprenda y enseñe algo nuevo. Nunca es tarde para aprender. Para muchos empresarios aprender cosas nuevas se convierte en secundario a ocuparse de los detalles diarios de operar y desarrollar su negocio. Por eso, durante el próximo año me esforzaré en aprender algo nuevo que pueda ayudarme a servir mejor tanto a mis clientes y a mi equipo de trabajo.
También haré todo lo posible por aprender algo que no tenga nada que ver con mi negocio como, por ejemplo, cocinar al estilo gourmet, paracaidismo o la historia de la música.
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De otra parte, la experiencia de dirigir nuestros negocios nos enseña continuamente cosas nuevas, por lo que es importante compartir dichos conocimientos y dichas experiencias con aquellos compañeros de trabajo, familiares y amigos más jóvenes y con menos experiencia.
En 2017 me propongo buscar oportunidades para enseñar cosas nuevas a otros, sobre todo cosas que les puedan servir tanto en su vida profesional como personal.
Miremos al futuro siempre. Los empresarios y ejecutivos dedican mucho esfuerzo a desarrollar sus negocios y asegurar su efectivo funcionamiento día a día. Muchos estudios indican que los empresarios y ejecutivos descuidan el desarrollo de una visión a largo plazo, el desarrollo de un plan estratégico de crecimiento, así como descuidan el análisis de las condiciones de su mercado y de su competencia.
Por eso, pienso que los dueños de negocios necesitan pensar de forma diferente. En este próximo año, espero poder enfocar mis energías más allá de las problemáticas del día a día y dedicar más tiempo a enfocarme en oportunidades estratégicas y en desarrollar mi visión de crecimiento para los próximos tres a cinco años, enfocarme igualmente en las posibilidades de desarrollo profesional de mi equipo de trabajo a largo plazo.
Tú vas primero. El hecho de haber desarrollado una compañía exitosa no significa que usted deba someterse totalmente a ella en detrimento de sus necesidades personales. Los empresarios deben dedicar tiempo a sí mismos esforzándose, por ejemplo, en comer saludable, dedicar algunas horas a la semana para meditar, practicar yoga o pilates, y esforzarse por alejarse momentáneamente de su oficina para recargar baterías. En este sentido, puede resultar positivo hacer un viaje para renovar energías y aprender cosas nuevas.
Diviértase. Un Nuevo Año presenta nuevas oportunidades y desafíos que los dueños de negocios y ejecutivos deben enfrentar con empeño y entusiasmo. Considero que lo más importante para el 2017 es recordar divertirse tanto en el trabajo y en nuestra vida personal. Si usted no disfruta de lo que está haciendo, esto le afectará y puede tener un impacto negativo en su equipo de trabajo.
