La actividad manufacturera en Estados Unidos profundizó su caída en abril a medida que la incertidumbre causada por las políticas arancelarias del presidente Donald Trump se expande en el sector, según datos de una encuesta publicada el jueves.
A inicios de abril, Trump anunció una serie de aranceles para todos sus socios comerciales, pero poco después los suspendió excepto para China, que enfrenta sobretasas del 145% para muchos de sus productos.
Las idas y venidas del republicano con los aranceles generó un clima de incertidumbre en los mercados financieros.
El índice manufacturero de la federación profesional ISM alcanzó 48,7% en abril, por debajo de lo registrado en marzo y del 50%. Por encima de este porcentaje se considera que hay expansión, y por debajo, contracción.
Sin embargo, el resultado fue ligeramente mejor de lo esperado por el mercado, según el consenso de analistas realizado por Briefing.com.
“La demanda y la producción cayeron y la reducción de personal continuó, ya que las empresas respondieron un ambiente económico desconocido”, dijo en un comunicado el jefe de la encuesta de ISM, Timothy Fiore.
“El aumento de precios se aceleró ligeramente debido a los aranceles, causando retrasos en la colocación de nuevos pedidos, lentitud en las entregas de proveedores y un crecimiento en los inventarios de fabricación”, agregó.
Las empresas que participaron en la encuesta subrayaron las políticas comerciales de Trump como la causa principal de sus preocupaciones.
“Las guerras comerciales arancelarias son increíblemente volátiles, cambian rápido y perturban gran parte de nuestro trabajo”, dijo una empresa en la encuesta.
“La reciente imposición de aranceles del 145% a las importaciones chinas está afectando significativamente nuestras ganancias de 2025”, respondió otra compañía.
“Debido a la complejidad de nuestras piezas no podemos encontrar proveedores alternativos, especialmente a un coste razonable, a nuestras actuales fuentes chinas”, añadieron.