El comercio entre Estados Unidos y la Unión Europe (UE) se mantiene como uno de los pilares económicos globales. Las decisiones que afectan esta relación generan consecuencias más allá del Atlántico, especialmente cuando se trata de medidas unilaterales como los aranceles impulsados por el magnate, Donald Trump.
En los últimos meses, los aranceles se convirtieron en una herramienta política recurrente. Washington recurrió a ellos para presionar acuerdos, modificar reglas o castigar prácticas que considera desleales. La UE, por su parte, respondió con llamados al diálogo y advertencias sobre medidas recíprocas.
Una nueva ronda de tarifas aduaneras reactivó este ciclo. La reacción europea no tardó.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, criticó este 12 de julio los nuevos aranceles del 30% anunciados por el presidente estadounidense Donald Trump, pero declaró que el bloque europeo aún desea trabajar en un acuerdo comercial con Washington.
“Imponer aranceles del 30% sobre las exportaciones de la Unión Europea (UE) alteraría las cadenas de suministro transatlánticas esenciales, en detrimento de las empresas, los consumidores y los pacientes a ambos lados del Atlántico”, declaró von der Leyen en un comunicado.
“Seguimos dispuestos a continuar el trabajo hacia un acuerdo antes del 1 de agosto. Al mismo tiempo, tomaremos todas las medidas necesarias para salvaguardar los intereses de la UE, incluida la adopción de contramedidas proporcionales si es necesario”, añadió.
La lideresa europea insistió en que “pocas economías del mundo igualan el nivel de apertura de la UE y su adhesión a prácticas comerciales justas”.
“La UE ha priorizado sistemáticamente una solución negociada con Estados Unidos, lo que refleja nuestro compromiso con el diálogo, la estabilidad y una asociación transatlántica constructiva”, aseguró.
A 30% tariff on EU exports would hurt businesses, consumers and patients on both sides of the Atlantic.
— Ursula von der Leyen (@vonderleyen) July 12, 2025
We will continue working towards an agreement by August 1.
At the same time, we are ready to safeguard EU interests on the basis of proportionate countermeasures.
Trump dijo este sábado que los principales socios comerciales de Estados Unidos, la UE y México, afrontarían unos aranceles del 30% a partir del próximo mes, que justificó citando el rol del país americano en el tráfico de drogas hacia Estados Unidos y un desequilibrio comercial con el bloque europeo.
Estas tarifas entrarían en vigor el 1 de agosto, indicó el magnate republicano en cartas separadas publicadas en su plataforma Truth Social.
Una portavoz de la UE dijo que habían sido informados de los nuevos aranceles antes de que Trump diera a conocer las misivas.
Diplomáticos europeos señalaron que una reunión no programada de embajadores de los 27 países de la UE fue convocada el domingo en Bruselas para discutir la medida.
El nuevo impuesto anunciado por Trump es más elevado que el gravamen del 20% que había dado a conocer en abril.
La UE, junto con decenas de otras economías, debía ver incrementado su nivel de aranceles del 10% a un nivel superior el miércoles, pero el mandatario estadounidense retrasó la fecha límite al 1 de agosto pocos días antes de que estos entraran en vigor.
Bruselas preparó aranceles de represalia sobre productos estadounidenses por valor de unos 21.000 millones de euros (24.500 millones de dólares) después de que Trump también impusiera gravámenes separados a las importaciones de acero y aluminio a principios de este año.
De momento, su aplicación fue aplazada hasta el 14 de julio. Si bien las autoridades europeas no han tomado medidas para prorrogar la suspensión, podrían hacerlo rápidamente si fuera necesario.