
La compañía de productos y servicios de infraestructura para redes de datos y aplicaciones de energía eléctrica Panduit dejará de producir en Costa Rica y ahora operará la fabricación de productos bajo pedido (MTO, por sus siglas en inglés) en México.
Este traslado parcial, de las instalaciones de Grecia a Monterrey, generará despidos de los cuáles todavía no se oficializa el número de trabajadores que tendrán que dejar la empresa, según informó la Panduit a La Nación este martes 18 de enero.
“A medida que las líneas de producción se trasladen a México,se producirán reducciones graduales a lo largo de 2022, con lo que algunos empleados se verán impactados”, informó la empresa a La Nación.
Sin embargo, Panduit aclaró que es una parte de sus operaciones la que será trasladada, pero en suelo nacional continuará la fabricación de abrazaderas plásticas, canaletas para cables, componentes de parcheo de cobre, conectores de cobre y productos de identificación.
“Los esfuerzos de inversión de Panduit en Costa Rica también incluyen el aumento de capacidad para producir canaletas y abrazaderas de alto valor como parte del programa actual de renovación de máquinas de abrazaderas de la empresa y del crecimiento del mercado”, explicó la empresa y según publicó el medio la tarde de este martes 18 de enero.
Además, la empresa subrayó que la decisión de la reducción de la actividad se tomó luego de un análisis de las necesidades de su mercado empresarial y que se basan en la posibilidad de “ofrecer plazos de entrega más competitivos a nuestra base de clientes de Redes Empresariales y de Centros de Datos en la región de las Américas”.
Panduit, que pasó de 28 a 1.350 colaboradores con su planta en Grecia, comunicó que indemnizarán y ayudarán a los empleados despedidos para que logren colocarse nuevamente en el mercado laboral.
“Estamos comprometidos a tratar a nuestros empleados afectados con respeto, dignidad y agradecimiento. Por esta razón, proporcionaremos indemnizaciones y servicios de recolocación para apoyar la transición y la búsqueda de nuevas oportunidades laborales de los empleados impactados”, redactaron en un comunicado enviado a La Nación.
Esta multinacional llegó al país en 1998 y uno de sus últimos procesos de crecimiento fue la ampliación de su planta con una inversión de $35 millones, en el 2011.