El concurso Taza de la Excelencia reveló, días atrás, la lista de los cafés ganadores del premio que los acredita como los mejores de Costa Rica.
El grupo lo componen 30 cafés de 26 fincas distintas, procedentes de tres regiones cafetaleras del país. Como es usual, la zona de Los Santos destacó este año como la región con las puntuaciones más altas y la que más cafés premiados tiene.
Taza de la Excelencia se prepara así para la etapa de subasta internacional, luego de un concurso en el que se introdujeron varias novedades.
LEA MÁS: El declive del café en Costa Rica: ¿qué hay detrás de la pérdida de peso del grano de oro?
Los ganadores
Taza de la Excelencia es un concurso anual abierto a todos los cafetaleros costarricenses cuyo objetivo es seleccionar a los mejores cafés de cada cosecha y exponerlos al mundo.
Tras una serie de etapas con jueces nacionales e internacionales que prueban decenas de muestras, se genera una calificación. Todos los cafés con nota de 87 o más se consideran ganadores y pasan a la subasta electrónica internacional.
Este año, un total de 30 cafés alcanzaron ese piso de 87, por lo que son ganadores del premio. No obstante, destacan aquellos que lograron las mayores puntuaciones.
De hecho, este año el concurso rompió dos récords: se dieron 11 premios presidenciales, que son aquellos cafés con 90 puntos o más, y se logró la nota más alta registrada desde el inicio del concurso en 2007: 93,62 puntos.
Uno de los cambios de este año es que, por primera vez, la competencia se dividió en tres categorías. Cada finca tenía la posibilidad de participar en dos de ellas. Esta novedad ocasionó que haya tres primeros lugares, uno en cada rama.
La primera de ellas es la de cafés lavados. Este proceso se refiere a cuando se retira la cáscara de la fruta y el mucílago. De esta forma, solo queda la semilla y una película que la protege llamada pergamino. Esta última también se quita cuando se va a exportar.
En este apartado la finca Santa Teresa, de la región de Los Santos, obtuvo la puntuación más alta, con 92,04. Otras siete fincas también ganaron con un café lavado.
La segunda categoría es la del proceso natural y miel (también llamado por su nombre en inglés: honey). En el natural el café se pone a secar sin retirarle nada, incluso con la cáscara. Mientras que en el miel se deja una parte del mucílago que recubre la semilla. Al secarse, esto causa que el azúcar de la fruta impregne la semilla con un nuevo sabor. Ambos procesos dan al café notas de sabor similares, por eso compiten en el mismo grupo.
LEA MÁS: Costa Rica es el 15.° productor mundial de café; vea dónde se produce más y a dónde se exporta
Esta es la categoría con más participantes y más ganadores. Aquí se alcanzó la nota máxima de 93,62, de parte de la finca Don Cayito, también de Los Santos. Además, el segundo lugar lo obtuvo la finca La Torre, la única ganadora proveniente de la región Brunca.
La tercera división premió a los cafés con fermentaciones y experimentales. Esta convocó a aquellos que tenían procesos más creativos y diferentes a los dos anteriores.
De nuevo la región de Los Santos ganó este apartado, con la finca VOO, que alcanzó 91,19 puntos. Además resalta la presencia de cuatro fincas de la región Valle Central Occidental.
LEA MÁS: Así va el cierre de la cosecha de café por región
Ganadores recurrentes
Para la mayoría de las fincas premiadas este año el triunfo es habitual, pues han sido ganadores en años anteriores.
Santa Teresa, primer lugar en la categoría de lavados este año, ocupó en 2023 la novena posición de la lista general y la octava casilla en 2022.
La finca Don Cayito, que este año rompió el récord de la mayor calificación, ha sido tres veces primer lugar de la competición en concursos previos.
Don Cayito es un negocio familiar que cuenta con varias parcelas en los alrededores de Santa María de Dota. Esta familia produce, procesa y comercializa su café a través de su microbeneficio y su propia marca que lleva el mismo nombre de la finca. Además, tiene una cafetería en Dota.
El año pasado Don Cayito no ganó, pero se ubicó en tercer lugar.
La finca VOO, por su parte, obtuvo la segunda mayor calificación el año pasado. Esta se localiza en Copey de Dota y vende su producción a través de la marca Sagaz Coffee.
El Cedro-Hacienda San Isidro Labrador, Volcán Azul, Don Eli o Don Joel son otras de las fincas que repiten entre los ganadores de Taza de la Excelencia.
La zona de Los Santos es la mayor productora de café de altura de Costa Rica, lo que hace que haya mayor representación de estos cantones y, por ende, más posibilidad de que ganen. La zona del Valle Central Occidental es la principal competidora.
Más exposición
La idea de dividir el concurso por categorías dejó buen sabor de boca en la Asociación de Cafés Finos de Costa Rica, organizadora de la competición. Por lo que este formato podría ser la nueva norma.
El cambio busca permitir a más productores participar y que cada uno lo haga con el tipo de café que mejor sabe producir y atraer a nuevos compradores internacionales que buscan tipos de café específicos.
“Un café anaeróbico es muy diferente a uno lavado y uno puede opacar a otro. La idea es que puedan sobresalir cada uno como se merecen”, comentó Noelia Villalobos, directora ejecutiva de la asociación.
Otro cambio que se dio este año y que posiblemente permanecerá en el futuro, es que la catación con especialistas internacionales se sacó de San José y se llevó a Dota, con el fin de dar una experiencia distinta. Esta fase rotará entre las distintas regiones cafetaleras.
Los cafés ganadores se preparan ahora para la subasta internacional, un proceso que se lleva a cabo electrónicamente en el que compradores anónimos del extranjero hacen sus mejores ofertas con el fin de llevar a sus países alguno de los cafés costarricenses premiados.