Evite caer en problemas por facturas incobrables

María Fernanda Landaeta

Cuando los pagos se atrasan y se empiezan a acumular esas cuentas que se catalogan como incobrables, el flujo de caja de las empresas se ve afectado. Esto es un problema común y una de las principales razones por las que las pequeñas y medianas empresas van a la quiebra.

Para la abogada Nina Kaufman, lo primordial es prevenir el problema, lo que puede lograrse con tres medidas sencillas, las cuales describió a la revista Entrepenuer: envíe la factura con una regularidad definida y siempre a tiempo; dele seguimiento a la factura con una llamada (o correo) tras una o dos semanas, no espere un mes; y procure realizar un acuerdo por escrito que incluya los términos en que se colectará el pago, de forma que si el cliente no paga usted tenga los fundamentos legales para exigir el pago que se le debe.

Otros expertos recomiendan enviar la factura apenas termine el trabajo, no necesariamente esperar a fin de quincena o de mes. Asimismo, siempre puede pedir un pago parcial o “adelanto” previo al inicio del trabajo, como una forma de retener la cuenta y una prueba de buena fe. Ese adelanto puede ser un tercio, el 40%, el costo de materiales o lo que usted considere prudente.

Una táctica que puede servir para educar a sus clientes es la de dar una recompensa por el pronto pago. Por ejemplo, puede ofrecerles un descuento para que paguen de inmediato o en un rango de tiempo específico.

En Estados Unidos es común que ese descuento sea de alrededor de un 2% si el pago se hace en un plazo de 10 días, de acuerdo a la guía web About.com.

Si ya cuenta con problemas de liquidez no se de por vencido. Adopte las prácticas de grandes empresas como simplemente fraccionar el cobro de toda partida pendiente que tenga con los clientes. Se trata de un arreglo, que podría contemplar algun tipo de interés.

Así lo sugirió la empresa española de asesoría para pymes IF Assessors, cuando ese país se enfrentaba a un escenario de morosidad alto con la crisis financiera. De esa forma, al dividir el pago, mejorará la liquidez con el transcurso de los meses.

Y no se olvide de su papel como cliente y los plazos que tiene para pagar, ya que podría mejorar su flujo de caja si espera a pagar las facturas en su fecha de vencimiento y no apenas llegan.