El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC) publicó hoy un informe en que señala la tendencia creciente en el porcentaje de personas con trabajos informales en un reporte hasta el cuarto trimestre del 2013. En ese período, tal fenómeno alcanzó al 44% de la población ocupada.
La cifra ha oscilado entre el 36% y 45% del tercer trimestre del 2010 al cuarto trimestre del 2013. La tendencia de aumento paulatino de este tipo de empleo ser registra a partir del primer trimestre del 2012.
Por su parte, el empleo formal representó el 56% en el cuarto trimestre del 2013, con variaciones entre el 64% y el 55%.
El trabajo informal es caracterizado por el INEC por diversos rasgos. Entre ellos, por ejemplo, que está compuesto por personas asalariadas sin seguridad social financiada por su empleador (no tienen rebajos de seguro social). También por personas asalariadas que sólo les pagan en especie o que el pago fue realizado una única vez, a quienes por la naturaleza de su contratación, se considera que no son susceptibles de los rebajos de seguro social. A su vez, por personas ayudantes no remuneradas.
La Organización Internacional del Trabajo advierte que, “aunque no es posible generalizar con respecto a la calidad de los empleos informales, con frecuencia implican malas condiciones laborales y está relacionada con el aumento de la pobreza. El empleo informal puede tener características como falta de protección en casos como el no pago de salarios, obligación de hacer sobretiempo o turnos extraordinarios, despidos sin aviso ni compensación, condiciones de trabajo inseguras y ausencia de beneficios como las pensiones, el reposo por enfermedad o el seguro de salud.”
A inicios del 2011, con la crisis económica, el porcentaje de personas ocupadas se encogió, pero los empleos informales también bajaron. Sin embargo, según el INEC, para el 2012 se incrementó la ocupación (ronda el 56%), pero tal incremento vino acompañado por un mayor porcentaje de empleos informales.
En ese escenario, dice el INEC, “la estabilidad de la tasa de ocupación parece haberse sostenido con empleos informales, que crecieron a un ritmo mayor que la misma ocupación.”
¿Quiénes lo sufren?
La presencia del empleo informal varía según el género, la edad y la escolaridad de los ocupados.
Entre los hombres, el 40% tiene un empleo informal. Ese porcentaje crece a 49% entre las mujeres ocupadas.
Según la edad, la mayor concentración se registra en las edades entre 25 y 34 años y 45 a 59 años. Al último trimestre del 2013, tales grupos abarcaron el 52% del empleo informal, y son mayoritarios tanto dentro de los hombres como las mujeres con empleo informal.
En términos generales, dice el INEC, la población ocupada con empleo informal tiene un bajo nivel educativo; para el cuarto trimestre del 2013, el 74% de los ocupados con empleo informal tenían entre primaria incompleta o menos y secundaria incompleta.