Resultado de votación estatal será clave para definir cuál partido se alza con la mayoría en la composición del Senado.
Las próximas semanas serán claves en la escena política estadounidense, pues la potencia tendrá al mando al presidente republicano, Donald Trump ―quien afirma que hubo irregularidades en el proceso electoral― mientras el mandatario electo se encamina hacia el despacho oval con un mensaje de unidad para el pueblo norteamericano.
Nuria Marín, analista internacional, conversó con EF sobre las elecciones de Estados Unidos y las implicaciones de la victoria de Joe Biden.
Estados Unidos se preparaba para no conocer un vencedor temprano, dado que algunos estados podrían estar contando las papeletas durante varios días.
Este 3 de noviembre la potencia norteamericana tendrá una elección histórica en medio de una crisis sanitaria y económica que obligó a los estadounidenses a emitir su voto de manera anticipada a través del correo.
En 2016 las encuestas también ponían a Hillary Clinton como favorita para ganarle al empresario.
Fueron retiradas por intentar obstaculizar la participación en la votación.
Por primera vez los electores de este estado clave para ganar las presidenciales pueden pedir que les sea enviado un boletín de voto por correo.
Con las elecciones a la vuelta de la esquina, Trump teme convertirse en el primer presidente en 25 años en no conseguir un segundo mandato, desde que su correligionario republicano George H. W. Bush perdió frente a Bill Clinton en 1992.
A tres meses de las elecciones que decidirán quién se convertirá en el nuevo Presidente de los Estados Unidos, los votantes tienen ante ellos distintas opciones para elegir el sufragio, por correo, de manera anticipada o haciendo fila en las urnas son parte de estas.