El Congreso intenta apaciguar los ánimos de una parte de la población que ha salido a las calles a pedir la renuncia del presidente guatemalteco, en medio de manifestaciones ciudadanas que no se veían en el país desde 2015.
El Congreso intenta apaciguar los ánimos de una parte de la población que ha salido a las calles a pedir la renuncia del presidente guatemalteco, en medio de manifestaciones ciudadanas que no se veían en el país desde 2015.