Escuchar:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/gruponacion/P5534G6TOBD5ZKAHVHG7WKLFQM.jpg)
The Abbott manufacturing facility in Sturgis, Michigan, on May 13, 2022. - Abbott representatives announced on Wednesday that the Sturgis plant could reopen within the next two weeks, subject to FDA approval. The company initiated a voluntary recall after two infants became sick and two died with traces of Cronobacter sakazakii, a common environmental bacteria, found in their systems after consuming formula produced in the plant. (Photo by JEFF KOWALSKY / AFP) (JEFF KOWALSKY/AFP)
El grupo estadounidense Abott acordó con la justicia estadounidense reiniciar su producción de leche en polvo para bebés en su planta de Michigan con el fin de paliar la escasez de este producto vital para los pequeños, anunciaron el grupo y el departamento de Justicia este lunes 16 de mayo.
Estados Unidos vive una rara falta de leche en polvo para bebés que preocupa a millones de padres.
LEA MÁS: Actualización es clave para mantener la competitividad en investigación médica
Inicialmente causada por problemas en la cadena de aprovisionamiento y falta de mano de obra por la pandemia, la penuria se agravó en febrero cuando una fábrica de Abbott cerró en Michigan tras el retiro de sus productos sospechosos de haber provocado la muerte de dos bebés.
LEA MÁS: Conozca las investigaciones que se pueden hacer con seres humanos en Costa Rica
La agencia estadounidense de medicamentos (FDA) exculpó a la leche “483″, pero descubrió irregularidades relacionadas con la fábrica, indicó Abbott el viernes 13 de mayo, resaltando que “comenzó inmediatamente a llevar a cabo acciones correctivas”.
El Ministerio de Justicia y Abbott precisaron en un comunicado aparte que el acuerdo aún debe ser validado por un juez.
Pero el fabricante, uno de los mayores actores del mercado de leche para bebés, espera reabrir su fábrica de Michigan en las dos semanas que vienen. Repitió que necesitaría luego “6 a 8 semanas antes de que sus productos estén disponibles en estantes”.
Durante ese tiempo seguirá importando leche para bebés de su fábrica en Irlanda para tratar de limitar la escasez en Estados Unidos.
“Sabemos que millones de padres y de cuidadores dependen de nosotros y lamentamos profundamente que nuestro retiro voluntaria haya agravado la penuria de leche materna a escala nacional”, indicó el lunes el grupo.
“Trabajaremos duro para volver a ganarnos la confianza que las mamás, los papás y los cuidadores depositan en nuestros polvos desde hace más de 50 años”, agregó.
