El pasado 22 de diciembre el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) intervino el Banco Crédito Agrícola de Cartago (Bancrédito). Esta medida se tomó cuando la entidad alcanzó irregularidad nivel tres, después de meses de pérdidas y ante la incapacidad de poder cumplir con sus obligaciones.
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Tras esta decisión, la institución estará intervenida por seis meses (periodo que puede ser prorrogable) y su futuro, de momento, es incierto. Lo que sí se sabe es que el próximo Gobierno es quien tendrá que recibir el criterio de los interventores para definir la ruta de Bancrédito.
EF conversó con los candidatos a la vicepresidencia de los principales partidos políticos para conocer qué haría cada uno en un eventual Gobierno. Durante la consulta se plantearon tres posibles escenarios: que tras la intervención de Conassif el banco siga operando; que decidan declararlo en quiebra o que lo cierren liquidado.
En caso de que los interventores y Conassif recomienden la quiebra o la liquidación, esta debe estar respaldada por una ley de la República que indique el destino de la entidad.
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Epsy Cambell, candidata a la vicepresidencia del Partido Acción Ciudadana (PAC), manifestó que la evidencia financiera muestra que el banco debería de ser liquidado. “Lo que procede y lo que es más barato para el sistema es la liquidación, con todos los pasos que están previamente establecidos. Para los propios ahorrantes, para los clientes, el banco no existe en términos financieros reales”.
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Luis Paulino Vargas, candidato a la vicepresidencia del Frente Amplio, considera que se debe de tomar en cuenta el criterio del Conassif para luego analizar las capacidades del banco.
“No sabemos qué se va a resolver a partir de la intervención (...) lo que nosotros querríamos es recuperar Bancrédito y poder convertirlo en una entidad sólida, rentable, que cumpla la función que corresponda a la banca pública. Para lograr esto hay que reconocer que el banco tiene limitaciones importantes y la primera es el tamaño, que es pequeño”.
EF llamó al encargado de prensa del Partido Integración Nacional (PIN), para gestionar la entrevista con María Cecilia Moreira, candidata a la vicepresidenta, pero al cierre de edición no hubo respuesta.
En el Partido Liberación Nacional (PLN) se contactó a Edgar Ayales, pero el candidato a la vicepresidencia prefirió que la posición oficial la asumiera Antonio Álvarez Desanti.
“Vamos a esperar el informe de Marco Hernández, el interventor, don Marco tiene mucha experiencia porque había intervenido el Banco Anglo y vamos a esperar a que él nos dé el informe para saber cuál es el camino a seguir y vamos a seguir el consejo de la junto interventora. Si la junta interventora dice que el banco hay que liquidarlo, vamos a proceder.”, afirmó Álvarez Desanti.
En el Movimiento Libertario se le consultó a Otto Guevara, candidato a la Presidencia, ya que es uno de los diputados que presentó dos proyectos de ley ante la Asamblea Legislativa para reformar la institución.
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Guevara seguiría adelante con la intervención pero no le inyectaría recursos a Bancrédito porque aumentarían las pérdidas y buscaría vender el banco. En un eventual gobierno tomaría el liderazgo en el Poder Legislativo para buscar que se apruebe uno de sus proyectos.
Las dos iniciativas de Guevara tienen como objetivo transformar a Bancrédito en una sociedad anónima. Una versión le traspasa el 100% de las acciones al Banco de Costa Rica (BCR) para que opere como una subsidiaria, y el otro texto plantea vender las acciones de la institución (activos y pasivos) mediante una subasta pública internacional.
Edna Camacho, candidata a la vicepresidenta del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), comentó brevemente que de acuerdo a lo que establece la ley, le corresponde al Conassif tomar la decisión.
A poco más de dos semanas de la intervención, el Gobierno solicitó al Conassif y al Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef), que no interrumpa la investigación en el banco para determinar las causas que la llevaron al deterioro.