Viajar en primera clase es el sueño de muchos turistas, especialmente en aquellos vuelos largos en los que un asiento más amplio, la posibilidad de reclinarlo para dormir y la disponibilidad de comida hacen el viaje más cómodo.
Sin embargo, el obstáculo para tener un viaje así es el costo de los boletos de primera clase o clase ejecutiva, los cuales, con frecuencia, duplican el monto de la clase turista convencional.
Pero no se preocupe, hay algunos consejos que puede seguir para intentar viajar en una categoría superior sin gastar miles de dólares.
Más allá de las low cost
Hernán Jackson, presidente de la Asociación Costarricense de Agencias de Viajes (ACAV), indicó que es importante tener en cuenta el concepto de oferta y demanda, pues las aerolíneas van ajustando el precio de los boletos de acuerdo con diversos factores. Eso también pasa con los tiquetes de las categorías superiores.
El representante contó que es común que los usuarios llamen para consultar directamente cuál es la tarifa más barata para tal fecha y destino. En vez de eso, Jackson aconsejó que lo mejor es decir que se quiere viajar a equis lugar en determinada fecha y preguntar cuál es la tarifa disponible y la diferencia con la de primera clase en ese momento.
“Muchos creen que solo existen vuelos low faire, pero eso es solo en algunas aerolíneas y algunos destinos”, comentó.
El presidente de ACAV agregó que los usuarios pueden revisar la lista de agencias de viaje autorizadas en el sitio web de la Asociación.

Esperar por un upgrade
Enrique Rivas, periodista y asesor de viajes del blog ‘La Mochila de Kike’, contó uno de los trucos que pueden funcionar para viajar en primera clase.
Este consiste en no comprar el boleto en primera clase o ejecutiva inicialmente cuando se adquiere el tiquete, sino que lo aconsejable es comprarlo en clase turista y esperar hasta el día del check in o 24 horas antes para optar por un upgrade.
Por ejemplo, Rivas contó que recientemente viajó hacia España por $650. En el vuelo de ida lo hizo en clase turista y para el vuelo de regreso consiguió un ascenso por $450 extra, mientras que ese mismo boleto en primera clase puede costar unos cuantos miles de dólares.
Esperar hasta el final y consultar por la posibilidad de un upgrade puede permitir ahorrar dinero si se busca viajar cómodamente, pero tiene el riesgo de que no haya disponibilidad de asientos en la clase más elevada.
Uso inteligente de millas
Un tercer consejo es ser parte de un plan de lealtad con una aerolínea. Idealmente, debería ser una compañía aérea que pertenezca a alguno de los conglomerados de aerolíneas más grandes del mundo, pues esto hace que las posibilidades de acumular y redimir las millas se expanden.
En el mundo existen tres grandes alianzas de aerolíneas. Una es Skyteam, con 18 empresas miembro, la segunda es Oneworld, que tiene 14 empresas aliadas, y la tercera y más grande es Star Alliance, que cuenta con 25 compañías dentro.
En Skyteam están aerolíneas como Aeroméxico, Air France y Delta. Oneworld tiene entre sus miembros a Iberia, Alaska Airlines, American Airlines, British Airways y compañías asiáticas. Mientras tanto, a Star Alliance pertenecen Copa, Air Canada, United Airlines y Lufthansa, entre otras.
Existen dos formas de acumular millas. Una es ganarlas volando con las mismas aerolíneas, ya que las compañías suman las millas automáticamente con solo viajar con ellas y la inscripción a los planes es gratuita usualmente.
La segunda manera es tener una tarjeta de crédito de algún banco que esté unida a un plan de lealtad. Aquí las millas se acumulan con el uso mismo de la tarjeta: entre más consumo, más millas se acumulan. Esta es la forma con la que se pueden sumar más millas.
La clave está en usar estas millas de forma inteligente. Lo ideal es gastarlas en trayectos largos, donde se les saque más provecho.
“Sale mucho más rentable utilizar millas en traslados más largos que usarlas para viajar a Guatemala o Estados Unidos. Igual te estás ahorrando plata, pero estás gastando demasiadas millas en un trayecto corto”, explicó Rivas.

Por ejemplo, el periodista contó que recientemente tomó un vuelo de Costa Rica a Roma que le costó 60.000 millas más $109, pero, en ocasiones, un viaje a Perú o Estados Unidos puede costar lo mismo en millas.
Con el uso inteligente de estas millas, especialmente en viajes de larga distancia o fuera del continente, se pueden conseguir boletos de primera clase con lo que se ahorra dinero y se hace un uso eficiente de las mismas.
Planee su próximo viaje tomando en cuenta estos tres consejos.