Las utilidades, el crecimiento de las ventas, la innovación y el aumento de la planilla son buenos indicadores. Pero el éxito va más allá de los resultados que se muestran en un estado financiero.
Lo que determina ese éxito es cómo se manejen los desafíos, siguiendo algunas señales de viaje muy sencillas:
1. Trabaje en red: Para tomar la vía hacia el éxito empresarial encuentre aempresas con las cuales pueda aliarse, así como trabajar para innovar y encontrar nuevos negocios y mercados. Escoja bien con quién aliarse. Siga adelante y no se deje influenciar por personas negativas. Muchos no entienden el negocio o le transmitirán sus propios miedos para emprender un negocio o innovar. Simplemente siga tomando riesgos (claro está analice todo con anticipación).
2. Revise las señales: La información de la empresa, de los clientes y de los proveedores debe ser transformada en decisiones que le permitan conducir la empresa entre los cambios de la ruta. Utilice tecnologías que sinteticen los datos para determinar tendencias y decidir qué se va hacer. Observe: ¿qué está ocurriendo? Comprenda: ¿por qué ocurre? Prediga: ¿qué ocurriría? Incentive la colaboración: ¿qué debería hacer el equipo? Decida: ¿qué camino se debe seguir?
3. Tenga creatividad: Tenga creatividad, persistencia e inventiva para encontrar nuevas vías hacia el mercado. Enfóquese en nuevas formas de resolver los problemas de los clientes, mejorar los procesos de producción y de servicios, encontrar nuevos mercados y compradores, mantener los actuales clientes, cambiar la atención en las tiendas y en línea (redes sociales y comercio electrónico). Para ello debe conocer al mercado, a los proveedores, a los clientes y a la competencia mejor de lo que conoce a su propia empresa.
4. Contrate el mejor talento: Aunque tenga el mejor plan de negocios y el mejor producto y servicio, la única manera para que funcione la empresa es contar con el mejor talento que también ayude a su conducción. Si lograr formar un equipo de colaboradores que ayuden al desarrollo de los negocios, debe hacer todo lo posible por mantenerlo y para que trabajen unidos.
5. Elija la meta y la estrategia para alcanzarla: No puede abarcar todo el mercado que desea de un solo. Elija su meta como cuando decide a cuál sitio hacer un viaje. Además, decida su estrategia (enfocándose en un segmento y acercándose poco a poco) como cuando decide cuál será su ruta para llegar a ese sitio y cómo hacerlo de forma más económica, efectiva y exitosa.
6. Cuide los detalles: Los detalles son todo. Los clientes identifican cuándo la empresa atiende todos los aspectos relacionados con cada compra y con el negocio alcanzando siempre un mejor nivel de calidad, servicio, atención a los clientes y cultura de innovación. Cuide todos los detalles, incluso aquellos que son difíciles de ser percibidos por los compradores; pero tenga claro que un leve descuido será notado primero por los más quisquillosos y luego por todos. Además sorpréndalos: ellos solo quieren recibir aquello que es predecible y consistente, y al mismo tiempo salir de la rutina, que les ofrezca algo nuevo, innovador y adicional.
7. Distinga a los clientes: Conozca a sus clientes, a los que son –precisamente- quisquillosos, a los que quieren todo regalado y a los que solo desean un servicio atento y a la medida. Construya relaciones interpersonales aún si enfrenta situaciones críticas, de escepticismo excesivo, de irritación e incluso de reserva.
8. Deje una huella: Implemente un programa de responsabilidad social.El personal y el cliente prefieren compañías que tengan conciencia social y ambiental, que lo demuestren en su práctica diaria.