Etiquetas ascenso

El ascenso a la cima corporativa es una expedición más compleja que escalar el Everest. Requiere un balance preciso entre la ejecución y la visión ("bailar y ver desde el balcón"), humildad para corregir rápido y una motivación que supere el ego. Un análisis sobre la mentalidad, el sacrificio y la autenticidad necesarios para el máximo liderazgo.


Opinión de Miguel López | Para alcanzar una posición de alta gerencia siempre se requiere de una buena dosis de paciencia. Puede haber cinco o más niveles que atravesar, compitiendo por cada nueva promoción con otras personas inteligentes y ambiciosas, tanto dentro como fuera de la empresa. Y a medida que se asciende, el aire se vuelve progresivamente más enrarecido. Llegar a la cima no es para todo el mundo.