A través de un financiamiento pudo construir la mayor parte del local, pero no le alcanzó y vendiendo tamales y comidas completó el resto.
Etiquetas imas
Dulce Bendición tenía limitaciones en su capacidad de producción para atender pedidos, por lo que la microempresaria se propuso buscar una solución. Y lo logró.
Un análisis sobre el Programa Avancemos del IMAS revisa el impacto de los beneficios económicos mensuales a estudiantes en condición de pobreza.